hurricane 🜚 james potter ✓

🐍 •.✶˚▍𝟬𝟭𝟵. hogsmeade

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❛.*🐺 🐀 CHAPTER NINETEEN *🐕 🦌ˎˊ˗

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Amara Kinsley era realista. Nunca se permitía esperar cosas que sabía que solo la decepcionarían al final. Amara no tenía tiempo para ser idealista. Al nacer en una familia donde tanto el abuso emocional como físico era algo normal, Amara se asignó a sí misma la tarea de proteger a sus hermanos menores tanto como pudiera, incluso si eso significaba recibir palizas por ellos.

Maxwell había sido el más rebelde. No tenía ningún problema en expresar sus pensamientos y eso significaba que Amara lo cuidaba mucho más. Había pasado muchas noches de su infancia afirmando haberle contado las cosas que soltaba. Ella asumió la responsabilidad de las cosas que había hecho muchas veces, con cicatrices ensuciando su cuerpo para demostrarlo. Y cuando murió, Amara juró que se aseguraría de que Olivia y Samuel nunca tuvieran que correr el mismo destino.

Ella no quería irse, pero sabía que tenía que hacerlo. Después de leer el diario de Maxwell y descubrir por qué había elegido hacer las cosas que había hecho, Amara juró que evitaría que volvieran a suceder.

Descubrió que todo giraba en torno a Olivia. Los únicos pensamientos de Amara entonces no eran Olivia. Oh, Dios. No mi hermana pequeña.

Olivia era la más joven, nacida solo unos minutos después de Maxwell, pero siempre había sido la más frágil. Le encantaba creer que podía controlar bien sus emociones, pero ellos sabían lo contrario. Olivia sentía las cosas a un nivel tan extremo que se sentía abrumada con y entonces trataba de empujarlo hacia abajo, ignorándolo hasta que finalmente explotaba. Olivia también era la más inocente de todos, o quizás la más despistada. Sus manos no estaban manchadas de sangre como las de sus hermanos. Nunca había apuntado con su varita a alguien con la intención de causarle un dolor permanente y Amara estaba decidida a mantenerlo así.

Así que hizo sus maletas. No se lo dijo a nadie más que a Samuel. Siguió las instrucciones y deseos de Maxwell. Le dio a Olivia el diario unos años después, como Maxwell quería. Viajó a diferentes países en busca del vidente que había predicho la profecía. Amara aprendió rápidamente que era imposible rastrear a una persona que veía el futuro, pero no iba a darse por vencida tan rápido. Cada callejón sin salida que encontró no la detuvo. Lo estaba haciendo por Olivia, su hermanita por la que ella daría su vida. Estaba decidida a encontrar al vidente, encontrar una manera de revertir la profecía, encontrar una escapatoria.