𝐔𝐧 𝐕𝐢𝐚𝐣𝐞 𝐧𝐨 𝐏𝐥𝐚𝐧𝐞𝐚𝐝𝐨

Capítulo VI

Llegada la hora de la cena se pusieron las capas y bajaron al Gran Comedor, entran y ven sentados en una mesa a todas las personas de la lista a las cuales reconocieron gracias a fotos que les mostraban en casa.

Pudieron ver de reojo que Teddy hasta soltó una lágrima al visualizar a sus padres.

Se sentaron en la mesa que apartaron para ellos y decidieron que iban a ir en orden de mayor a menor.

-Alumnos como ya habrán notado tenemos unas visitas pero me complace decir que no son de...- Dijo Dumbledore pero fue interrumpido con una tos forzada antes de que una voz chillona empiece a parlotear.

-Profesor Dumbledore el Ministerio no...- dijo una enana con cara de sapo vestida de rosa chillón y un lazo de terciopelo negro en la cabeza que se asemejaba a una gran mosca.

-bla bla bla charla sobre cosas tontas del Ministerio- interrumpió la voz de James entre los encapuchados notoriamente enojado con aquella mujer

-Sabías que vas a Azkaban por tus crímenes vieja bruja, por si no lo sabías el maleficio torturador es ilegal- agregó sin poder reprimir información sobre el futuro -Además esa pluma, uyy vas a estar en problemas por dejar cicatrices permanentes en niños-

James estaba furioso, ella se acercó pero antes de poder hacer algo el Gran comedor rompió en gritos de felicidad.

El profesor Flitwick fue directamente a la lechucería seguramente para informar al ministro.

-Bueno prosigo- Dijo Dumbledore- estos chicos no provienen de esta época son del futuro- (N/A: re kasual aki lo de todos los días)

Todos los alumnos empezaron a murmurar, Lily vio en la mesa de Gryffindor al trío de oro, se escuchó a Ron decir:

-te apuesto diez galeones, Harry, a que Fred y George ninguno de los dos se casa ni tiene hijos.

En eso llegan los dos mencionados.

-Ya vas a ver Ron- Dijo Fred.

-Te duplicamos tu apuesta a que sí, nos prometimos que debe haber bromistas en Hogwarts en un futuro, si no lo hacemos nosotros, no lo va a hacer nadie, y Filch sin dolores de cabeza puede hacer cualquier cosa sin poder castigar a nadie, como divertirse -terminó George.

-Vamos con la primera presentación- anunció Dumbledore volviéndose a sentar.