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En el octavo día, recibió una carta de su padre.
La encontró entre sus cosas cuando despertó. Más bien, su abuelo la había dejado descaradamente sobre su mochila. Era buen momento para creer que ya estaba enterado sobre las cartas que escondía sin abrir. O tal vez no era ningún secreto para él porque nunca hablaban de su padre. Al menos no de la forma en que ella lo deseaba. Era como un claro mensaje de "lee la carta" Lo cual era confuso porque ellos no se llevaban del todo bien. No después de que él se fuera abandonando toda posibilidad de que heredase la escuela.
Miró el sobre con atención, al menos aún sabía cómo se llamaba su única hija. O bien, su hija, no sabía siquiera si ya tenía alguna pareja o si volvió a formar una familia. Quizá lo descubriría si leía alguna de las cartas. Tal vez le mandaba fotos y postales de los lugares que visitaba. No lo sabía y sin lugar a dudas, ese no era el día que se aventuraría a descubrirlo. Cinco años sin verla, en serio era el padre del año.
Lo segundo más importante que ocurrió ese día fue que Soojin apareció.
La chica había desaparecido literalmente de su vida. Sólo había tardado en lo que su abuelo le decía que hablarían sobre lo ocurrido en casa y lo que tardó en ver cómo el mismo corría a Hui de la escuela prometiendo presentar cargos si volvía a acercarse.
Minnie fue quien sacó del armario a la rubia y despues de eso Shuhua regresó a la sala del consejo cuando sólo quedaba la menor. Siquiera pudo agradecerle, bueno... no pudo intentar agradecerle. En cierta parte fue un alivio ya que agradecer no era algo que estuviera muy acostumbrada a hacer. Era más fácil volver a tener esa extensa platica donde su abuelo habló largo y tendido sobre la importancia de respetarse a sí misma y el cómo debió tenerle confianza para esas cosas, lo sabía, no tenía por qué recordárselo.
Que lo creyera era el problema.
Incluso Minnie desconocía a dónde había ido. Mencionando a Yontararak, ésta ahora se acercaba de vez en cuando a hablar con ella. Era más seria y educada que la rubia, pero sin duda, era de su tipo. ¿A qué se refería? No era idiota, sabía que se vestía y maquillaba como ella al salir de la escuela. Incluso le llegó a ver el celular y estuvo a punto de confiscarselo, pero lo dejó pasar por la ayuda que recibió de ella con lo de Hoetaek.
Miyeon le preguntó si la había cambiado por la señorita Nicha, por lo que fue una molestia explicarle que sólo eran amigas.
Dejando todo eso, le había mencionado que a veces hacía esas cosas. Desaparecer uno o dos días y volver cuando menos la esperaba. Le contó muchas cosas sobre la rubia. La más alta era muy platicadora y era como si intentara compensar las dos o tres palabras de Shuhua en una hora con su plática sobre cualquier cosa.
"¿Nunca le has preguntado a dónde va?" Ella lo haría, estaba pensando en hacerlo mientras veía esa sonrisa en su rostro. Quizá ese fue el momento en que por fin dijo más palabras seguidas hacia ella y por eso contestó tan rápido.
