Capítulo 11. El olvido

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[NARRADOR ONMISCENTE]

Había pasado casi una semana desde la noche de Santa Isabel y el ambiente en el internado era de todo menos alegre. La muerte de Cayetano sin duda había afectado a todos y al que más al director, pero no tanto como el hecho de que pese a que los médicos hicieron de todo Astrid aun no despertaba. Jacques Noiret parecía preocuparse por su hija pero aun así estaba cabreado por lo que había hecho, pero no tanto como lo estaba con Iván, del cual desde esa noche no se sabe donde está.

La policía lleva buscando una semana a Iván por todo el bosque y pese a que aún no encontraron ninguna pista sobre su posible paradero no dejan de buscar, aunque no se si por el miedo que le tienen a Jacques o porque en verdad les interesa encontrarlo.

Tras identificar el cadaver, Héctor ordeno que cuando tuvieran la autopsia realizada le mandaran los resultados para ver porque su alumno había muerto. Después de eso fue cuando recibió la llamada que acabó de destrozarle, y es desde entonces que no se ha separado de Astrid.

En su ausencia Elsa ejerce el papel de directora, y en su vida se había sentido mejor. No sabes lo bien que sienta el poder hasta que lo pruebas.

Ya era el onceavo día, en que la chica que se encontraba en aquella cama del hospital no daba la señal de querer aferrarse a la vida que le quedaba. Héctor había salido de la habitación para ir a por un café cuando recibió una llamada de Elsa.

· ¿Hay novedades?

o Han llegado los resultados de la autopsia de Cayetano, deberías venir a verlos por ti mismo

· Voy ahora mismo

o ¿Qué tal Astrid? ¿Sigue igual?

· Sigue sin despertar, los médicos han intentado de todo

o Acabará despertando ya verás, seguro que si

· Eso espero, no podría soportar perder un alumno más

Tras terminar de hablar con su ex prometida Héctor, se dirigió a la salida del hospital donde se cruzó con el padre de la chica, él cual iba a verla por primera vez en 11 días

-El médico empezará mañana con el tratamiento de Ottox para mi hija – oyó que decía Jacques por teléfono pero no le dio como tal mucha importancia

Mientras Héctor se dirigía al internado en busca del resultado de la autopsia, el médico le sacaba sangre a Astrid y se la llevaba a la zona del laboratorio perteneciente a Ottox.

Nada más llegar al internado lo primero que el director hizo fue leer el informe, no daba crédito de lo que estaba escrito en la hoja, pero era su deber como director velar por sus alumnos. Así pues mientras él hablaba con Iván, carolina, Marcos, Victoria y Roque varios profesores registraban las habitaciones de los anteriormente nombrados.

-Pero que nosotros no nos drogamos - dijo cabreada Carolina ante lo dicho por su director

-Usted dijo que Cayetano no tenía problemas pero si los tenía, sus padres se van a divorciar – sentencio Roque

Antes de que cualquiera pudiera decir algo más Pedro entró al despacho con lo encontrado en los armarios de los adolescentes

-Si vosotros no es drogáis supongo que podréis decirme que hacía esto escondido en vuestros armarios, cinco bolsas con pastillas y vaya justo estáis cinco aquí – dijo irónico Héctor ante la situación

-¿Qué le hace pensar que eso es nuestro? Podía ser perfectamente de la psicópata suicida, viniendo de ella no me extrañaría nada – soltó Carolina dejando a todos sorprendidos

-No tienes porque saberlo Carolina pero la señorita Noiret sobre de trastorno explosivo intermitente y ese día por el motivo que fuera no se tomo la medicina, cuando tuvo el ataque llamo a Iván y Marcos y ninguno le cogió el teléfono como dijeron que harían, en vez de eso estaban corriendo aventuras por el bosque. Me parece una falta de respeto hablar así de una persona que se está debatiendo entre la vida y la muerte y en cuanto a ti Marcos me esperaba más de ti. Ella confió en ti por su problema y tú le fallaste, quizás si le hubieras cogido el maldito teléfono esto no habría pasado. Y en cuanto a las drogas ya veré que hago, ahora fuera de mi vista todos antes de que os expulsé, ah y Carolina 3 semanas de cuadras por faltar al respeto, claro en el caso de que a final de semana sigáis aquí dentro – dijo furioso su director

Héctor sabía que se había pasado de la raya con Marcos pero estaba tan cabreado que le daba igual.

Los días seguían pasando e Iván seguía desaparecido y Astrid seguía sin despertar. Marcos estaba devastado por las palabras de su tutor legal, se preguntaba qué habría pasado si en vez de estar en el desván con Carolina, hubiera estado apoyando a Astrid. Tal vez nada de esto hubiera pasado.

Cuando estaba a punto de pasar dos semanas ya, María recibió una llamada de quién menos se esperaba

· ¿Sí? ¿quién es?

o María, soy yo Iván, ¿estás sola?

· ¡¿Iván?! ¿Dónde estás? ¿Cómo estás?

o Shhh, no grites tanto, dónde he estado no importa, solo que estoy bien. Te llamo porque necesito dinero

· ¿Cómo que necesitas dinero?

o Pues eso, estas sorda o que

· No vale, te llevo dinero. Estate en la laguna a las 4.30

o De acuerdo, dile a mi hermana que estoy bien, que no tiene que preocuparse

· Eeeh eso va a ser un poco complicado, ahora mismo no está en el internado....

o ¿Cómo que no está ahí? ¿dónde está?

· No creo que te guste lo que te voy a decir Iván...

o Que donde está he dicho

· Está en el hospital, el día que encontraron el cuerpo de Cayetano y que desapareciste una alumna de bachiller la encontró en el baño. Se intentó suicidar, lleva en el hospital desde entonces. Salió perfecta la operación pero aun no despierta, los médicos le están haciendo pruebas

o A ver si me he enterao, me estás diciendo que mi hermana pequeña se intentó suicidar y ahora está en coma. Olvídate del dinero, voy a ir al hospital

· Está en la 2º planta habitación 27

Iván después de eso no dijo nada más, tan solo colgó la llamada y empezó a correr en dirección al hospital sintiéndose culpable por lo que le había pasado a su hermanita, en todo el tiempo que estuvo fuera nunca pensó que podría pasar algo así, claro que había olvidado por completo su trastorno. Y eso era lo que más le mataba.

Tal y como había dicho, Iván no tardo mucho más de una hora en llegar al hospital desde el bosque y en ningún momento paró de correr hasta llegar a la habitación, donde para su sorpresa se encontraba su padre.

-Iván, ya era hora de que aparecieras no crees – dijo Jacques sin dejar de mirar a la chica

-Solo vine por ella papá, no por ti – dijo el hijo pasando al otro lado de la camilla, quedando en frente de su padre

-Casi dos semanas y no has tenido la decencia de llamar si quiera. Tú hermana podría haber muerto y tú acostándote con tú prima. Debería darte vergüenza – mencionó el mayor mirando por primera vez a su hijo

-Si sabías donde estaba porque no viniste eh

-Y dejar a Héctor todo el día con Astrid no gracias – mencionó con malicia

-Pues tal parece que solo hacía falta que llegara yo para que despertara – mencionó con burla Iván al ver a la muchacha abrir los ojos 

Astrid en el Laguna NegraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora