Capitulo 28

7.1K 428 69
                                    

A L E X A

Ha llegado el último día del año, un año el cual me sorprendió mucho, unas de esas situaciones que no me esperaba pasar fue el volver a reencontrarme con el hombre de mi corazon, el padre de mi hija hasta recibí cartas con amenazas, secuestraron a mi pequeña y algo hermoso el viajar con mi familia a islas.

- ¿En que piensas? - su voz me saca de mis pensamientos.

- En todo lo que he vivido este año - le sonrió.

- Tienes una sonrisa hermosa - me da un pico.

- Con la cual te enamore - hablo con diversión.

- Tu me enanoraste con tu locura - comienza a reír.

- Pareces loco riendo solo - me le tiro encima.

- Te acuerdas aquel día cuando me pediste o mas bien yo tenia la obligación de ir contigo como tu guardaespalda, que fuimos a un puente donde podías hacer puenting y yo todo asustado de que saltaras y la cuerdas se desatara o rompiera pedí ir primero aunque tenia miedo de tirarme del puente y terminar muerto en el río - Suelto una risa al acordarme de aquel momento.

Me acuerdo perfectamente del día ese, la noche anterior había estado viendo videos y me aparecieron esos donde se tiran de puentes o precipicios, donde una va atado de los pies o de la cintura y pues me parecía una locura maravillosa hacer algo así y pues por que no intentarlo. Así que busque donde lo podía hacer y a la mañana siguiente fui con daddy y otro guardaespalda.

Daddy tenia una cara de horror por lo que estaba por hacer y yo estaba emocionada por tirarme.

- Me mirarte y te reíste de mi por tener miedo a que te pasara algo a ti pero no al que a mi me pudiera pasar algo, y me propusiste tirarnos juntos y por supuesto que acepte aun con miedo - reí, pone sus manos en mi cintura y me sienta arriba de él.

>> Tu tenias un brillo en tus ojos y una sonrisa preciosa, una vez los dos atados saltaste haciendo que gritara por el susto y tu solo gritabas de alegria, feliz con lo que estábamos haciendo y riendo te mi.

- Me divertia verte con miedo a tirarte de un puente y no a ser guardaespalda que es mas peligro - comento.

- Ese día me enamore de tu sonrisa y del brillo que tenia tu mirada al cometer alguna locura que no todos se animan - me besa.

- ¿Hacemos el amor? - pregunto acariciando su cabello.

- ¿Aquí? - masajea mi culo.

- Si aquí, Sam esta con tu hermano - ataco sus labios.

Lo acuesto sobre el sofá, y nos seguimos besando.

- Hazme tuya - le pido.

Comienza a dejarme besos y mordidas suaves en mi cuello.

- ¿Daddy acaso me quieres dejar llega de marcas? -

- Si pequeña para que vean que tienes dueño - estruja mi culo.

- La única que luego me pregunta es tu hija y ya no se que explicación darle - me quejo.

- Haz silencio nena o tendré que que poner algo en tu dulce boca - habla dominante.

- Pon tu pene sobre mis labios - estoy caliente y necesito de él.

Guía mi cabeza hacia su hombría, a lo cual chupo como si se tratase de una paleta de helado.

Bajo un poco mas y chupo sus huevos y los acaricio leí por hay que esto les encanta a los hombres y lo confirmo daddy suelta suspiros y gruñe cuando meto todo su miembro en mi boca.

Nuestra Pequeña PrincesaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora