-𝐀𝐧𝐝𝐫𝐞𝐰 𝐃𝐞𝐚𝐧-

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Miriam camino aburrida hacia la oficina de su tío, un vez ahí toco dos veces y entro, un hombre se levanto firme enfrente de ella

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Miriam camino aburrida hacia la oficina de su tío, un vez ahí toco dos veces y entro, un hombre se levanto firme enfrente de ella.

-Descansa fortachón.-sonrió sarcástica.-

-¡Miriam!

-Tío Ernest.-agrando su sonrisa.- Que milagro.

-Tu madre me dijo porque estás aquí.

-Aja, para ver a los perritos que tienes por ahí.-apunto a la ventana.-

-Tu mamá me marco.-hablo mientras seguía tecleando.-

-¿Ah sí?.-pregunto mientras veía la ventana, un hombre vestido con el típico uniforme jugaba con uno de los perros.-¿Y qué te dijo?

-Que te enseñara el lugar, si no te comportas te mandara acá.

-Ay tío, no fue tan grave.

-Chocaste el auto de tu mamá, en un restaurante, ¿No es suficiente?

-Bueno, si lo dices con ese tono.-sonrió y Ernest negó.-

-Miru.-negó.- Ven te enseño el lugar.- Ernest se levantó y le cedió el paso, ambos salieron de la oficina.-Oh mira el sargento Dean está aquí, escuchemos, ven conmigo.- ambos caminaron hasta quedar atrás de todos y siguió hablando.-

-Van a correr por el infierno, literalmente con mas de 20 kilos en tu espalda.- levanto la barbilla con superioridad.- El perro de la correa, mientras procuran no golpearle la cabeza con el rifle, y los soldados que los protegen.-rio sin gracia.-Los odiaran desde el primer día, si lo hacen bien.- se encogió de hombros.- Quizá salven su vida, si lo hacen mal terminaran muertos, y no importa lo terrible que yo ahora lo este haciendo parece.-negó.- Es mucho peor.

-¿De donde es el?.-pregunto Miriam en un murmuro.-

-Vino de Irak hace poco, ven saludemos.- sonrió.-Miru.- lo miro.-Se cortes.

-Claro que si.-rio y camino detrás de su tipo, una vez frente a el señor Ernest abrazo muy efusivamente al sargento Dean.-

-¿Cómo estas muchacho?

-Vivo teniente.-sonrió.- Es lo que importa.-asintio.-

-Quiero presentarte a mi sobrina, Miriam.

-Un placer.-estrecho su mano y Miriam sonrió.-

-El placer es todo mío.-guiño un ojo.-

-Miriam.- Ernest la miro.-

-Solo salude.-rio y el sargento Andrew rio con ella.-

-¿Te unes?.-pregunto.-

-Ni loca.-negó.-

-Solo viene a conocer el lugar, sargento, le molestaría hacerlo por mí?. Tengo que revisar un par de cosas.

𝐎𝐧𝐞 𝐒𝐡𝐨𝐭𝐬 𝐱 𝐓.𝐅Donde viven las historias. Descúbrelo ahora