XLIX | ¿Quién eres?

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Los siguientes días de la semana Ronald y Ginevra no aparecieron, Harry sabía que seguían en la escuela gracias al mapa del merodeador, pero algo lo molestaba y era que Dumbledore no aparecía en ningún lado.

Harry no sabía que pensar, estaba nuevamente nervioso, pero no era por él. Estaba nervioso por Draco.

Draco había estado actuando extraño esa semana, estuvo mucho mas pendiente de él, era como si Draco tuviera pequeños ataques de pánico que duraban apenas segundos y por mas que intentara calmarlo no lograba del todo su cometido.

"Dragón... me preocupas, deja que el padrino te revise, por favor" Le rogo por Morgana sabe cuanta vez en el día, era domingo y Draco no lograba salir de su habitación sin colocarse mal

"No, no Harry estaré bien, es solo el sentimiento de que algo saldrá mal"

Harry hizo una mueca, Apep estaba con ellos así que lo único que pudo pensar para no estar tan preocupado fue pedirle a la serpiente que no se alejara del rubio. A Apep le gustaba Draco y a Draco no le molestaba tener a Apep entre su ropa

"Si alguien quiere lastimarlo puedes morder a matar" Le siseo Harry, su ceño estaba fruncido desde el sábado. La desaparición del director y la actitud de Draco desde que eso sucedió no le daba buen presentimiento

"¡Lo hare amo! Yo protegeré a su compañero ¡Déjemelo a mí!"

Harry suspiro por eso, acomodando a Draco otra vez en la cama, ahora el que le daba masajes era él, notaba al rubio muy tenso

"Entonces lleva a Apep contigo, para todos lados ¿Sí? Te daré un traslador a mi mansión, solo debes tocarlo con tu magia y se activara, uno de mis elfos me dirá cuando llegues, no quiero que algo malo te suceda"

Si, Harry era un paranoico. Pero paranoico o no nunca dejaría a Draco desprotegido.

"Esta bien gatito, me llevare a Apep y no me separara de él o de ti, pero si llega a pasar estaré pendiente de todo. Trata de calmarte" Murmuro Draco, dándole un leve roce de sus labios en la frente de Harry. Se había asombrado de todos los cuidados que el menor tenía sobre él, pero de algo estaba seguro. Ahora se sentía mas tranquilo.

Harry volvió a suspirar, acostándose con Draco y abrazándolo fuerte, Luna había dicho hace dos días que 'Algo malo podría pasar' y la actitud de Draco ahora lo estaba desesperando, necesitaba con urgencia proteger a las personas que eran mas cercanas a él.

Esa noche Harry no fue a la torre de Gryffindor, dejaría que las alucinaciones de Ronald pararan una semana antes de seguir, no quería que por ese pequeño plan de venganza todo fuera en su contra


El lunes los Weasley menores volvieron aparecer, fue notable como el colegio entero repudio a Ronald, además de que los Slytherin habían aceptado muy bien a los gemelos, casi siempre se les veía comiendo en la mesa de las serpientes, pero como la semana anterior Dumbledore no estaba.

Harry se mantuvo con Draco a cada momento, solo hubo un momento en que se separaron, pero Harry creía que todo estaba normal

Cuan equivocado estaba.

El primer cambio, aunque pequeño, fue la actitud de Draco. Seguía a su lado en cada momento, pero ya no actuaba tan 'Mamá Dragona', aunque lo dejo pasar, sentía que Draco necesitaba un poco su espacio.

Lo que le hizo pensar que algo estaba muy mal fue al anochecer. Draco paso directo a su cama y el que no durmieran juntos era algo que solo cuando discutían pasaba

Maestro de la Muerte || Harry PotterDonde viven las historias. Descúbrelo ahora