El Anillo

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Kara miró a Lena entre sus brazos, ahora mismo tenía un único objetivo, sacar de ahí a Lena.

La joven Nia caminaba a su lado.

A Kara le tocó dejar en el suelo a Lena dos veces para entrar en combate con dos patrullas, a las que dejó inconscientes.

En la última contó con ayuda, pues se le unió su compañero.

Nia iba a presentarse cuando el compañero de Kara levantó una mano en señal de stop.

- Presentaciones luego, ahora hay que salir de aquí. - Miró directamente a Kara - No estaba en nuestros planes rescatar a nadie.

- Ella siempre estara en mis planes. - Dio una mirada muy expresiva, su compañero cambió de expresión.

- Oh ella... - Entendió a la perfección su recate.

- Si.

- Sabes que no debes poner en riesgo nuestra misión. - Su compañero quería que la mision se cumpliese, pero Kara protegería la vida de Lena con su propia vida.

- Lo sé.

Kara volvió a coger a Lena con sumo cuidado. No quería ocasionar más daños en su cuerpo.

Mientras caminaba Kara admiró los rasgos de Lena, que habían madurado con el tiempo.

Estaba preciosa. Acabaría con todo aquel que había ocasionado daños en el amor de su vida.

Solo deseaba que saliera de ese estado, que sobreviviese. Ahora que ella había podido volver.

Deseaba poder besarla, contarle sobre su historia, todo lo que había vivido, implorar su perdon por dejarla, aunque fuese obligada.

- Nia Nal puedes poner el brazo que cuelga sobre el cuerpo, - Dijo Kara haciendo referencia a el brazo que colgaba de Lena y le podía ocasionar algún daño - no quiero causarle ningún daño - Nia obedecio rapidamente.

- Zor- El, no tengo a donde ir... - A Kara le causó ternura la expresión de la joven. - me volveran a atrapar.

- Mientras encontramos un lugar seguro, te enseñaremos a defenderte Nia Nal, tienes un gran poder...

- ¡Zor-El! - Se detubo en seco su compañero - No

Kara vio cómo Nia estaba confundida.

No debian desbelar datos del futuro.

- Lo se Brainy. Te ayudaremos Nia.

Kara miró la mano de Lena que Nia le había dejado cerca de su cuerpo para evitar que cayese y se golpease con algo.

Algo llamó la atención de Kara, en los sucios dedos de Lena brillaba con la tenue luz un anillo... Un anillo de compromiso.

Todo el aire salió de los pulmones de Kara, casi deja caer el cuerpo de Lena, sintió como algo dentro de ella se rompía.

Le costó volver a recuperar el aliento.

Se sentía mareada.

Su cabeza era un sumidero de preguntas, de miedos, ¿La habría olvidado?¿Con qué derecho volvía a su vida despues de diez años?¿Sería feliz ahora? Teoricamente ella llevaba diez años muerta, era normal que una mujer como Lena hubiese rehecho su vida...

Brainy la notó muy callada durante todo el rato, ni siquiera había comentado nada al salir del bunquer, ni le había replicado cuando le había dicho de buscar refugio para la noche, nada.

Kara estaba en su mundo. Con lágrimas silenciosas cayendo.

Llegaron a una cabaña en el bosque, al parecer abandonada. Brainy realizó un rapido reconocimiento en el interior. Abrió la puerta alegremente.

Brainy dejó caer su petate.

- Comprueba el estado de salud de ambas y acomodalas. Yo hago guardia mientras.

Kara sin hablar asintio.

Entró en la cabaña, era muy simple un gran espacio con una mesa grande en uno de los laterales y una gran cocina. En otro lateral, dos sillones frente a una chimenea. Al fondo de la estancia había dos puertas, la primera que abrió Nia era un cuarto de baño. La segunda les dio a conocer una cama de cuerpo y medio y en uno de los laterales del cuarto un sofá de aspecto muy comodo.

Dejo a Lena en la cama. Nia se dejó caer en el sofá.

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