Empresa Lácteos.
-Anibal ¿Ya tienes todo listo para recibir al sr Santoro?-
-Por supuesto papá, quedamos de vernos a las 12, son apenas las 9am pero ya todo está perfecto-
-Confío en ti hijo, Barbara también estará presente para recibir a ese seńor-
-¿Barbara? ¿Por qué ella? Yo perfectamente puedo reunirme con el a solas-
-Porque ella es el pilar de esta empresa, si no te parece me da exactamente lo mismo pero te pido que tomes en cuenta sus opiniones-
-Esta bien papá, como digas-
-Suerte Anibal-.
Anibal era el mayor de los hermanos Elizalde, un hombre sumamente ambicioso y mentiroso, casado con Pricila, una mujer guapa y con clase pero sumamente infeliz pues su matrimonio era solo una farsa.
-Peque ¿Tú sabes de ese tal Santoro que se reunirá hoy con Anibal y Barbara?-
-Algo me comentó mi papá pero la verdad no estoy muy enterada-
-¿No piensas estar tú en esa reunión?-
-Mi papá no me dijo nada, ademas estara Barbara y ya después ella nos informara de que traro esa dichosa reunión-
-Ok peque, yo ya me tengo que ir, quede de llevar a mi mamá al doctor, nos vemos más tarde-.
*Le dio un beso en la mejilla y se fue*
Fernanda se quedo sentada, pensando en lo que era su matrimonio, en cómo había terminado casada con Damian si ni siquiera lo amaba.
Se dio un baño rápido y se fue a Lácteos, la empresa de su papá que por muchos ańos se había posicionado en el primer lugar en ventas ahora sufría una gran crisis que a los tenía a punto de la quiebra.
-Buenas tardes seńorita-
*Flor, la recepcionista que trabajaba en Lacteos dirigió su mirada hacía el hombre que la había saludado*
-Hola, buenas tardes ¿Puedo ayudarlo en algo?-
-Tengo una reunión con...-
*Aun no había terminado su frase cuando una mujer de larga cabellera apareció furiosa frente a Flor*
-Flor ¿Qué paso con los papeles que te pedí? El seńor Santoro esta apunto de llegar y...
-A punto no, ya estoy aquí, mucho gusto, yo soy Franco Santoro-
*Barbara volteo y pudo verla bien, tenía unos ojos grandes, profundos y un rostro precioso*
