¿No sonreirás para mí? (Пσ sιяνιєη∂σ мαs) ʟɪʙʀᴏ 1

Capitulo 76

Cuando Buen hermano mayor se fue para ir a ver las manos del Hermano mayor Triste, A-Yuan no estaba contento con que oscureciera su vista. Quería asegurarse de que el Gran Hermano Triste no sintiera ningún dolor, así que se levantó y se dirigió lentamente hacia donde estaban parados los dos hermanos mayores. Estaba esperando que lo enviaran de regreso a la cama, sin embargo, ese no era el caso.

Observó con atención al Gran Hermano Triste, buscando cualquier señal de dolor, ya que el otro no hablaba, A-Yuan quería ser su voz si veía el más mínimo cambio en su expresión que indicara malestar. Cuando vio que las manos del Hermano Mayor Triste comenzaban a temblar, inmediatamente quiso consolarlo. No estaba seguro de si era una señal de dolor o algo más, pero no quería pensar demasiado en ello.

Se lanzó hacia adelante y agarró la pierna del Gran Hermano Triste, mirándolo para ver si lo había ayudado en algo. Cuando Buen hermano mayor estaba triste o perdido en sus pensamientos, siempre hacía esto y lo hacía sonreír dulcemente de nuevo. Esperaba que sucediera lo mismo cuando usara esta táctica con el Hermano Mayor Triste.

Su objetivo lo miró y A-Yuan se sintió aliviado. Aunque el Gran Hermano Triste no sonrió, la niebla en sus ojos se despejó y ahora estaban correspondiendo la mirada de A-Yuan con una dulzura oculta, como cuando se conocieron por primera vez. Feliz de ver que había ayudado al otro, A-Yuan sonrió. Se sorprendió al ver que las comisuras de la boca del Hermano Mayor Triste se movían ligeramente hacia arriba, como si él mismo estuviera a punto de sonreír.

Nunca supo si el Hermano Mayor Triste realmente sonrió al final. Su fatiga lo alcanzó de nuevo y sus ojos se cerraron contra su voluntad. Por un tiempo, estuvo luchando para abrirlos de nuevo y ver si el Hermano  Mayor Triste podía sonreír o no, pero había perdido la pelea poco después, sumido en el sueño. Soñaba con lo agradable que se vería una verdadera sonrisa en el rostro del Hermano mayor Triste.

***

Wei Wuxian observó cómo Mo Xuanyu colocó cuidadosamente a A-Yuan en su cama con una sonrisa afectuosa. Ambos observaron al bebé dormido por un tiempo, fue muy dulce cómo se acurrucó en una bola inmediatamente después de ser cubierto con una manta. Todavía tenía sentimientos encontrados sobre el rechazo del niño hace unos segundos. Si bien le dolía no ser aceptado, sabía que esto era lo mejor, no estaba seguro de no causarle ningún daño a A-Yuan debido a su inexperiencia.

Se quedó de pie en medio de la habitación, sin saber qué hacer a continuación. Mo Xuanyu solo rara vez le daba órdenes, por lo que no podía contar con eso. ¿Debería quedarse hasta que su amigo volviera a hablar con él? ¿Debería irse en silencio ya que se acercaba el toque de queda y no quería romper más reglas hoy? Estaba seguro de que habría un infierno de castigo por desobedecer a Su She y actuar por su cuenta antes.

Antes de decidir qué curso de acción debería optar, se alarmó cuando A-Yuan se despertó de nuevo. Se horrorizó por un segundo, ¿fue por algo que hizo que el pacífico descanso del niño se vio perturbado? Luego, su terror incluso se intensificó cuando A-Yuan le dijo a Mo Xuanyu que había sido herido. Él mismo sabía que era mejor no dejar que nadie se preocupara por eso, solo había sido un castigo normal, nada más.

Quería negarlo todo, si sus amos supieran que se había estado quejando, seguramente no estarían muy contentos por eso. Pero ahora, ya era demasiado tarde, el gato estaba fuera de la bolsa. Mo Xuanyu venía hacia él, con preocupación en sus ojos y le ordenó que le mostrara las manos. No culpó a A-Yuan por hablar en su favor, el niño no sabía nada mejor; en realidad estaba agradecido de que se preocupara tanto por él, el niño no podía tener intenciones ocultas, su afecto era tan genuino como era posible.

Wei Wuxian suspiró internamente, aquí viene. Como se le ordenó que levantara la mano, no podía desobedecer, incluso si la orden provenía de Mo Xuanyu y no de sus maestros. Su único consuelo era que su amigo sabía que no debía intentar ayudarlo hablando con la familia Lan, ambos se enteraron de las consecuencias en la Torre Koi; Wei Wuxian esperaba no haberlo olvidado.

No se sorprendió cuando Mo Xuanyu trató sus heridas, siempre lo ayudaría con el dolor más severo sin dejar ninguna evidencia que pudiera enojar a sus amos. Pero cuando el niño más joven comenzó a vendar sus manos, Wei Wuxian perdió su confianza. ¿Por qué estaba dejando una evidencia física de su ayuda? ¿No temía lo que sucedería cuando sus amos se enteraran?

Wei Wuxian estaba entrando en pánico ahora, no quería que Mo Xuanyu fuera castigado por ayudarlo nuevamente, no era justo. No sabía cuál sería exactamente el castigo de Lans, pero no tenía que saberlo para querer proteger al chico más joven.

Estaba listo para retraer las manos para recordarle a su amigo que no debería hacer esto cuando sintió que algo le tocaba la pierna. Se sorprendió por un momento y miró hacia abajo para determinar la fuente de esa extraña sensación. Su boca se abrió al ver que era A-Yuan, abrazando su pierna y mirándolo con los ojos muy abiertos y una sonrisa brillante.

Se ahogó en esos orbes inocentes y se despertó sobresaltado de nuevo cuando Mo Xuanyu llevó a A-Yuan a su cama. Vio a su amigo bajar al bebé y descubrió que ya le tenía mucho cariño, después de conocerlo solo por menos de una hora. Estaba un poco decepcionado cuando el chico más joven regresó y le obstruyó la vista.

Entonces ambos se sorprendieron por el gong de la tarde que anunciaba el toque de queda. Oh no, llegó tarde de nuevo, ya debería haber regresado a su habitación, no estar soñando despierto y quedarse de brazos cruzados. Mo Xuanyu parecía haberse dado cuenta de lo mismo. Comenzó a susurrar mientras venía con él hacia la puerta. “Wei Wuxian, es hora de que regreses a tu propia habitación. Por favor, ten un buen descanso. Lamento no poder acompañarte, tengo que quedarme con A-Yuan. Te veré de nuevo mañana ".

Wei Wuxian asintió con la cabeza a cambio también para desearle buenas noches al otro y rápidamente se fue, estaba contento de que Mo Xuanyu no viniera con él, no quería que el niño estuviera solo. Se preguntaba qué tipo de expresión había tenido en el rostro de su amigo. Podía descifrar la preocupación, probablemente porque Wei Wuxian caminaba por los pasillos después del toque de queda. Pero también había algo más; si no supiera nada mejor, diría que era determinación.

La cabeza de Wei Wuxian de repente comenzó a girar de nuevo, al igual que esta tarde, su fiebre aparentemente volvió. No se dejaba distraer y caminaba con cuidado, esperando no encontrarse con nadie en su camino de regreso; tenía suficientes castigos por un día. El que acababa de ganar al romper el toque de queda llegaría solo por la mañana, estaba seguro de que Su She lo volvería a encontrar justo después del desayuno.

Se sintió aliviado cuando regresó a su habitación sin ser visto. Rápidamente se quitó la ropa sudada, se puso la bata de dormir blanca y se deslizó dentro de la cama. No se sintió reacio a hacerlo, Lan Wangji dejó en claro que podía usarlo. Una vez que se acostó, el cansancio con el que había estado luchando desde que salió de su habitación para ir a encontrarse con Su She finalmente lo alcanzó y se apagó como una vela antes de que se diera cuenta.

Se preocupó brevemente por las vendas que se había olvidado quitarse antes de irse a dormir, no serviría si sus amos entraran y los vieran, especialmente a Su She, se indignaría y lo castigaría por ello. Por otra parte, si se las quitaba ahora, podría ensuciar las sábanas impecables, lo que sería una infracción aún mayor. Así que decidió dejarlos puestos, escondiendo las manos debajo de la manta. Su último pensamiento fue que no debía olvidarse de quitarse las vendas antes de ir al encuentro de sus amos, eran demasiado sospechosos.