Capitulo 102

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Después de que Su She dejó el comedor, Wei Wuxian estaba atónito y aún procesaba lo que había sucedido. No podía entender por qué Su She había sido castigada, seguramente no podría ser por castigarlo, ¿verdad? Le había dicho a Wei Wuxian que, después de todo, sus otros maestros lo habían asignado para que fuera quien llevara a cabo sus castigos. Aunque ninguno de los otros miembros principales de la familia mencionó ni una sola palabra al respecto.

¿Quizás hizo algo que justificaría un castigo tan severo como ser despojado de su estatus y desterrado de la familia Lan recientemente? Pero Lan Qiren se enojó con él solo después de que le dijo al otro que había sido él quien había castigado a Wei Wuxian. ¡Y a Su She incluso le dijeron que se disculpara con un sirviente humilde como él! Aunque su disculpa no fue sincera en lo más mínimo y los escalofríos recorrieron la espalda de Wei Wuxian mientras su antiguo maestro hablaba con él, seguía siendo una disculpa adecuada. Sin embargo, las intenciones de Lan Qiren detrás de todo siguieron siendo un misterio para él.

Wei Wuxian se estaba retorciendo la cabeza en vano, ya nada tenía sentido para él. No entendía lo que estaba sucediendo a su alrededor, el único recordatorio de que él estaba realmente en la realidad era la mano de Lan Wangji que todavía sostenía la suya. Estaba apreciando inmensamente el gesto, sin embargo, no debería sobrepasar demasiado sus límites, no debe haber sido agradable para su maestro sostener su mano durante tanto tiempo.

Sabía que debería retirar su mano y agradecer a Lan Wangji por su consideración, pero descubrió que no podía hacer eso. El mero pensamiento de eso lo estaba poniendo ansioso de nuevo, ya que perdería el consuelo que anhelaba en secreto. Si la situación o el entorno fueran diferentes a los de ahora, estando él en Cloud Recesses  y teniendo a Lan Wangji a su lado, seguramente nunca se habría atrevido a pedir consuelo; más aún, nunca lo habría pensado, no habría podido sentirse tan seguro.

Aunque su solicitud llegó inconscientemente, no había planeado agarrar la túnica de su amo en primer lugar; A decir verdad, solo se dio cuenta de que había anhelado apoyo cuando ya tenía el dobladillo de la ropa de Lan Wangji en sus puños. Le había sorprendido gratamente la reacción de su maestro, pero, de nuevo, era el amable y benevolente Lan Wangji, el maestro más amable y comprensivo que había tenido.

Wei Wuxian se sorprendió cuando alguien dijo su nombre. Después del largo silencio que siguió a la partida de Su She, las palabras sonaron como un trueno dentro de la habitación. Solo después de un rato se dio cuenta de que Lan Qiren estaba de pie frente a él y aparentemente quería hablar con él.

Su maestro ahora seguramente lo castigaría ya que había terminado con Su She; Wei Wuxian todavía le tenía miedo a este maestro, gritaba mucho. Pero, ¿por qué su voz era tan tranquila y discreta en este momento? Si no hubiera un tono ligeramente suave, Wei Wuxian habría asumido de inmediato que Lan Qiren estaba enojado con él. Estaba teniendo sentimientos encontrados; sabía que debía inclinarse y mostrar que estaba escuchando, pero al mismo tiempo, su mano todavía estaba en el agarre de Lan Wangji y el otro chico la había apretado ligeramente.

Wei Wuxian estuvo confundido por un momento, mirando a un lado a su maestro para ver lo que podía estar pensando. Sorprendido y tranquilizado, comprendió que Lan Wangji lo estaba animando; inmediatamente se calmó. Como antes, no debe pensar demasiado en las cosas, debe esperar a que sus maestros le expliquen.

Lan Qiren volvió a decir su nombre. Wei Wuxian se estaba volviendo más y más curioso a cada segundo. Sin embargo, su maestro no continuó y el silencio se hacía más largo. Si estaba a punto de regañarlo, ¿por qué no hablaba? ¿Por qué solo diría su nombre y nada más?

"Wei Wuxian, por favor mírame".

¿Oh?

¡Oh! Wei Wuxian finalmente entendió lo que Lan Qiren quería que hiciera. Lo que no sabía era por qué su maestro querría que levantara la cabeza. Se le había prohibido mirar a nadie a los ojos durante mucho tiempo. Al igual que no hablar con sus amos, esta fue una de las primeras reglas que Madame Yu le hizo obedecer. Nunca olvidaría las consecuencias que habría para él si rompiera esta orden. Cada vez que levantaba la cabeza, aunque accidentalmente, sin importarle mirar a los ojos a otra persona, sus maestros rompían el infierno, especialmente Madame Yu y Wen Chao.

¿Lan Qiren lo estaba probando? No, no caería en su trampa. Aunque todavía no había nadie para reemplazar a Su She y llevar a cabo sus castigos, Wei Wuxian sabía que nombrar a una nueva persona era solo una cuestión de una sola palabra de sus maestros.

Pero, ¿y si Lan Qiren le preguntaba en serio? ¿Y si estaba a punto de desobedecer una orden directa? Wei Wuxian ahuyentó su propio pánico inminente cuando recordó lo que había sucedido ayer durante la cena, cómo sus maestros estaban visiblemente sorprendidos de que no hablara con ellos pero no lo obligó a hacerlo. ¿Esta situación podría ser la misma que en ese entonces? ¿Lan Qiren solo no sabía que no podía levantar la cabeza y enfrentarlo?

Un susurro silencioso de Lan Wangji y un apretón en su mano hicieron que su pecho se calentara: “Wei Ying. Está bien."

Si Lan Wangji estaba diciendo que no había peligro, entonces Wei Wuxian podría calmarse. Sabía que este maestro no le haría ningún daño y de hecho hablaría por él. Estará bien incluso si él fuera a doblar un poco la regla, no desobedeciéndola por completo, sino cambiando ligeramente su naturaleza. Quería complacer a su maestro para que hiciera todo lo posible.

Asegurándose de que no estaría mirando directamente a Lan Qiren, levantó la cabeza unos centímetros. No estaba seguro de que su maestro estuviera satisfecho con esto, pero no se atrevió a levantar la cabeza más que eso. Lan Qiren había estado satisfecho o había decidido dejar el asunto porque comenzó a hablar de nuevo.

Wei Wuxian no podía creer lo que oía. ¿De qué estaba hablando? ¿Por qué se disculpaba por que Su She lo castigara con justicia? Wei Wuxian recordó que le dijeron ayer que debería sentirse bienvenido aquí y que podía venir a hablar con ellos en cualquier momento, sin embargo, había pensado que había sido solo una cortesía. Pero como Lan Qiren estaba repitiendo lo mismo otra vez, Wei Wuxian comenzó a pensar que realmente lo decían en serio.

Estaba extremadamente sorprendido en ese momento. Todavía no tuvo mucho tiempo para ingerir todo, con su fiebre y luego su reencuentro con Mo Xuanyu. La noche había sido demasiado agitada y luego él había estado demasiado cansado para pensar en todo en detalle y comprenderlo de verdad. Cuando le volvieron a decir lo mismo, no tuvo más remedio que creer que sus maestros habían querido decir cada palabra.

Cuando escuchó que no planeaban enviarlo de regreso a la Mansión Lotus Pier, su corazón comenzó a acelerarse. ¿Realmente no tendría que volver? Pero tenía una deuda que pagar con sus padres adoptivos por acogerlo y salvarle la vida. Si no fuera por Jiang Fengmian, habría muerto hace mucho tiempo mientras vivía en las calles. Los Jiangs le proporcionaron refugio y comida, incluso le habían enseñado a leer y escribir. Había tenido mucha suerte, no todos los niños huérfanos lo eran.

Tenía una deuda de por vida que pagar y si sus padres adoptivos decidían llevarlo de regreso, los Lans seguramente no podrían hacer nada en contra y tendrían que enviarlo de regreso. A pesar de saber todo esto, Wei Wuxian no pudo evitar estar encantado con la mera proposición de no tener que regresar. Incluso si sus maestros actuales no pudieran asegurar esto, era suficiente con que quisieran intentarlo. Era una clara señal de que estaban de su lado y querían ayudarlo.

Sintió que todos sus sueños se hicieron realidad en un solo momento. Los sueños que nunca se atrevió a expresar ni siquiera a sí mismo y que solo permanecieron en la parte más recóndita y oscura de su mente. Sabía que si alguna vez los hubiera dejado tomar una forma más real, no sería capaz de soportar la idea de que nunca se convertirían en realidad. Ciertamente se habría sentido triste cada vez que veía a alguien teniendo cosas con las que solo podía soñar, y a veces ni siquiera eso.

Había esperado que llegar a la Mansión Cloud Recesses pudiera ser más fácil para él, tal vez incluso que los Lans no fueran tan duros con él como lo habían sido sus maestros anteriores. Sin embargo, la realidad superó con creces sus esperanzas más locas.

Se quedó completamente congelado, sin saber qué hacer con sus propias emociones. Quería agradecer a sus maestros por sus amables palabras e intenciones, pero la única forma en que sabía cómo hacerlo era inclinarse ante ellos, lo cual no era posible en este momento ya que Lan Wangji todavía sostenía su mano con fuerza.

¿No sonreirás para mí? (Пσ sιяνιєη∂σ мαs) ʟɪʙʀᴏ 1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora