Maestro de la Muerte || Harry Potter

LXI

Después del juicio de Dumbledore, Sirius y Remus no eran mas que cascarones vacíos, la noticia de como el hombre estuvo manipulando sus vidas y fue el causante de la muerte de sus mejores amigos les había golpeado con fuerza, los primeros días estuvieron por completo hundidos en depresión, la luna llena paso y esta vez Remus sufrió mucho mas por el cambio, Sirius esta vez no logro ayudarlo

Ambos sabían que inconscientemente le habían pedido a Harry tiempo par recuperarse, pero ninguno sabía el día en que saldrían de aquello, o no lo sabían hasta que el antiguo señor oscuro apareció en medio del salón de la mansión Black

"Se que ambos están dolidos, al igual que muchos magos y brujas a lo largo de Gran Bretaña, mi pregunta es Black, Lupin ¿Dejaran que ese hombre gane? ¿Dejaran que la depresión los consuma? ¿Dejaran a Harry solo?" Pregunto Marvolo al momento en que los vio en el sofá, una mueca se posó rápido en su rostro, ninguno se estaba cuidando

"Les recuerdo que tanto como ustedes fueron manipulados también lo fue Harry, también lo fue Severus... también lo fui yo y ninguno nos estamos dejando llevar de la depresión"

Sirius hizo una mueca acomodándose mejor al lado de Remus, era como si el lord estuviera regañando a dos niños pequeños

"¿Qué podemos hacer?" Pregunto Rems, su tono era mucho mas melancólico que nunca

"Tu, empezando porque no dominas a tu lobo, puedes hacer eso, aceptar al lobo y dominarlo, la razón por la que no notaste el olor de los sentimientos negativos antes es por eso, detestas a tu lobo, pero es una parte tuya, tu lo necesitas como él te necesita a ti" Dijo Tom cuando se sentó en el sofá frente a ellos

"Y tu Black, puedes acompañarlo en el camino, el nombre Black tomara mucha mas importancia si eres tu quien demuestra que los hombres lobos se pueden controlar y no son peligrosos"

Remus se quedo en silencio, desde que fue mordido su pensamiento fue de terror, odiaba a su lobo, pero gracias a él había salido de muchos problemas, Marvolo tenía razón en muchas cosas

"Pero... necesitaría un alfa que me enseñe, nunca estuve en una manada de lobos y no creo que me acepten" El susurro de Remus fue escuchado por ambos magos, Tom tenia una sonrisa en su rostro, pero Sirius era otro cuento

"¿De verdad quieres hacerlo? ¿Aceptar a tu lobo? Sabes que luche mucho contigo antes para que lo hicieras, siempre decías que nunca pasaría... ¿Estas seguro de eso?" La voz de Sirius, aunque vacía se le notaba la preocupación

"Creo que ya es hora de aceptar la verdad Pad y Marvolo tiene razón, si eres tu quien me acompaña las cosas podrían cambiar para los hombres lobos aquí... quiero ser de ayuda"

Tom observo en silencio, desde hace mucho quería proponerle eso al lobo, pero no encontraba lugar indicado para hacerlo

"Esta bien" Dijo Sirius al final "¿Dónde tendremos que ir?"

La sonrisa de Tom se agrando más, cuando volvieran y Harry notara lo que paso estaría orgulloso de ambos

"Hay una gran manada en Rusia, parte de China, sus lideres son... amigos, puedo decirles que irán para un entrenamiento de un cachorro perdido" Porque si, eso era lo que Remus era, un cachorro que nunca se entreno

"Esta bien... ¿Harry? Se supone que vendría para Yule" Hablo Sirius aun, Remus estaba pensando en como serian las siguientes semanas, no negaría que tenia miedo

"Yo puedo estar con Harry en Yule, le diré que ustedes están bien, no es algo en lo que debemos preocuparlo"

Sirius asintió nuevamente, observando a Remus esperando a que el hombre reaccionara, Marvolo también esperaba de forma paciente