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𖥸𖥸𖥸

Las manos del pelirrojo empezaron a temblarle en cuanto leyó aquella carta. Una sonrisa traicionera empezó a surgir por su rostro.

Había tardado un año en responder y hacía como si nada? Fred se molestó un poco a decir verdad sin embargo no podía mentir.

Estaba de los nervios y su corazón latía con rapidez. Era demasiado para él, más ahora que se encontraba en su antigua casa, la madriguera, a punto de celebrar la boda de su hermano mayor.

-George, mira esto.- le dijo enseñándole la carta al pelirrojo, ahora con una sola oreja.

-Aún te acuerdas de ella? Ha pasado demasiado tiempo...- admitió George mirando a su gemelo.- Al final supiste si era May?

Fred negó, sin embargo la sonrisa todavía estaba presente. Una sonrisa triste al ver el contenido de la carta.

De nuevo la curiosidad de decirle a la dueña de las cartas que el estaba totalmente cautivado. Quería hablar con ella, era tanto pedir?

¿Después de un año y sigues amándome?

Fue lo único que escribió el pelirrojo antes de volver a mandar su lechuza.
-Fred! George!- les llamó su madre.- Estáis listos? La boda empezará dentro de poco...

George miró a Fred, el pelirrojo quien aún tenía la carta de la chica entre sus manos se la guardó en el bolsillo como en los viejos tiempos y una pequeña sonrisa apareció en su rostro cuando lo miró.

-Si, eso creo.- dijo este finalmente antes de empezar a caminar hacia la carpa donde se celebraría la esperada boda de Bill y Fleur.

letters to oblivion (Fred Weasley)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora