NARRADORA.
Con movimientos torpes Gonzalo desvistió por completo a Bárbara y luego él se quito su ropa.
-Estás tan bonita mi alma-. Le dijo mientras entraba en ella y suspiraba de placer.
Fernanda iba acercándose a la habitación de Gonzalo y Bárbara, quería hablar con su papá pero escucho a Gonzalo gemir y supuso lo que estaba pasando.
A los pocos segundos Gonzalo termino y dejo caer su cabeza en la cama.
-Fue maravilloso mi alma-. Dijo complacido.
POV BÁRBARA.
No sé ni siquiera como pude soportar que ese maldito anciano inservible me volviera a tocar, siempre me había dado asco pero el día de hoy fue peor, apenas y correspondí a sus besos, él estaba como loco, terminó en mí en menos de 1 minuto y es más que obvio que el único que disfruto fue el.
Cuando me di cuenta ya se había dormido, aproveche para meterme a bañar y lloré.
Me deje caer al piso mientras abrazaba mis piernas y maldecía mi vida. "¿Porqué desde niña me había tocado sufrir tanto?. Primero mis padres, después él mal nacido de Artemio, ahora tener que estar soportando a un viejo por él cual solo siento repulsión y odio.
Lo único bueno que podría tener en mi vida sería a mi hija y estaba a nada de asegurarme si realmente Aurora lo era, y bueno también a Franco, aunque lo de nosotros dos era prácticamente imposible.
Tarde más tiempo de lo normal en salir del baño, quería borrar los besos y las caricias de Gonzalo, quería específicamente borrarlo a él de mi vida.
En cuanto salí de bañarme baje al estudio para poder marcar al lugar en que estaba Aurora, me informaron que regresaba hasta en dos días.
"Dos malditos días tendré que esperar".
POV FRANCO.
Accedí a la invitación de Fernanda pero no en la casa vieja, en esa casa había vivido momentos muy especiales con Bárbara y sentía que ir allí con otra mujer sería como traicionarla, así ya no fuéramos nada.
Fernanda me cito en un restaurante algo lejano, llegue 15 minutos antes y ella ya estaba ahí.
-¡Franco!-. Se paro para saludarme y me planto un beso en la mejilla.
-Fernanda, buenas noches-. Sonreí e inmediatamente llego el mesero a pedir nuestra orden.
Estábamos teniendo una plática amena, me contaba sobre su etapa en la universidad y como era ahora su vida de casada, al parecer su matrimonio con Damian estaba a nada de fracasar.
-¿Y cuando regresa Damian de su viaje?-. Le pregunté.
-En 3 días-. Me respondió mientras se comenzaba a reír. -¡Ay! Perdón Franco, es que me acorde de algo que paso hoy bastante bochornoso-
-¿Quieres contarme? Así nos reímos juntos-. Le dije.
-Me da mucha pena porque en si no tiene que ver directamente conmigo-. Se acerco a mí y bajo su tono de voz. -Escuche a Bárbara y a mi papá teniendo relaciones sexuales-. Me confeso entre risas.
Yo me tome de golpe la copa de vino que tenía en mi mano y no pude evitar mostrarme algo molesto.
-Franco ¿Estás bien?-. Me pregunto Fernanda.
-S..si Fer-. Contesté tratando de sonar tranquilo.
-¿Sabes que me inspiras mucha confianza?-. Y cuándo estuve a nada de contestarle me dio un beso al cual esta vez si correspondí.
