2 semana después.
POV BÁRBARA.
Desde que me enteré que Aurora es mi hija no he tenido el valor de ir a verla de nuevo.
Me da miedo, miedo a que el infeliz de Artemio me descubra y quiera llevársela lejos, miedo a la reacción de ella cuando sepa que yo soy su mamá.
La he estado llamando para asegurarme de que esta bien, hablamos todos los días pero sé que ya no puedo seguir perdiendo el tiempo.
La alianza entre grupo Lácteos y Power Milk al fin se realizó, ahora sólo falta dar el último golpe y podré ser libre, por fin después de tantos años.
Pienso llevarme a Aurora, irnos lejos de aquí, empezar una nueva vida.
A Franco le he visto todos los días, quedamos en ser solamente "amigos", amigos con derecho porque hablar no es precisamente lo que hacemos cada que estamos solos.
Tampoco hemos echo el amor, nos besamos, nos acariciamos pero hasta ahí.
Quedamos los dos en que él podría hacer con su vida sentimental lo que le diera la gana al igual que yo, siempre y cuando no nos traicionáramos en los negocios.
POV FRANCO.
Después de la última noche que dormí con Bárbara nos hemos seguido viendo, en cada oportunidad que tenemos nos besamos y poco nos ha faltado para hacer el amor pero siempre alguien nos interrumpe.
Yo por más intente no puedo sacarla de mi cabeza ni de mi corazón pero también por más que intente ya no puedo volver a confiar en ella.
NARRADORA.
Franco llamo a Bárbara para citarla en la casa vieja, tenían que hablar sobre varías cosas de Lácteos y en la empresa no podían hacerlo con toda libertad.
La cito a las 12 de la tarde.
Ella llego antes que él, tenía otros planes, lo extrañaba y quería sentirlo de nuevo, así fuera la última vez.
A las 12 en punto llegó él. Bárbara lo recibió con una sonrisa y lo hizo pasar a la sala.
Sin decir nada lo beso apasionadamente y él le devolvió el beso de la misma manera, ya no aguantaba más, la extrañaba como nunca.
Franco tenía el rostro de Bárbara entre sus manos y le devoraba la boca. Succionaba sus labios, introducía su lengua acariciando la de ella.
Sus manos comenzaron a recorrer la cintura de ella mientras se dedicaba a morder su cuello. La mordisqueo suavemente. Bárbara gimió y Franco continuó besándola con desesperación. Llego hasta su hombro, el cual también mordisqueó, mientras le apretaba las nalgas.
El sexo de Bárbara estaba ya completamente mojado. Había a extrañado a Franco y mucho.
Continuaron besándose apasionadamente. Franco la subió en su cintura y camino con ella así.
-Espera-. Le dijo Bárbara jadeando.
Se bajo de él y saco una botella de champagne.
-¿Quieres?-. Le propuso con voz seductora.
Él se acercó. Ella abrió la botella y regó un poco del líquido en su cuello.
-Vamos, bebe de mí-. Le sugirió y él se volvió loco.
Le succiono el cuello y ella sabía que eso dejaría notables marcas pero en ese momento nada le importaba.
Sin dejar de besarse caminaron hasta la habitación principal.
Comenzaron a hacerlo de pie, aún con la ropa de arriba puesta.
Franco la arrincono contra la pared y no dejaba de besarla. Noto lo empapada que estaba y él ya no aguantaba, le quito por completo las bragas, la levanto del suelo con las piernas de ella enredadas en su cintura y la penetro.
Bárbara gritó. Le había dolido pero fue un dolor totalmente placentero.
La hizo descender, como un loco le quito toda la ropa. La llevo hasta la cama y ella se arrodillo sobre él. Se acomodó entre sus piernas y ahora la penetro con su mano.
Bárbara jadeaba y lo pedía a él dentro de ella.
Franco obedeció y en pocos minutos la hizo llegar al orgasmo.
Mañana les subo la otra parte besties.
