Tᴡᴇʟᴠᴇ Kɪʟʟᴇʀs. ᶻᵒᵈⁱᵃᶜ

ℭ𝔞𝔭𝔦𝔱𝔲𝔩𝔬 28 [Parte II]

Leo estaba fuera del cuarto a una hora bastante madrugadora, las seis de la mañana, hora en la que Acuario acostumbraba a despertar.

Solo que está vez ella no estaba en la habitación.

— Mierda, hace bastante frío hoy. — Iba directo a prepararse un té.

Se había sentado a leer y estudiar todo el material que su compañera de cuarto le había obsequiado un día antes y claro lo que ella ya tenía desde hace tiempo, para que aprobara aquel examen que tanto deseaba y mencionaba cada noche.

— Vamos Leo... — Se dijo a sí misma.

Un mensaje llegó.

Buenos días Leo.

Ánimo, tu puedes.

Tuve que irme... Por razones personales, pero estoy mejor.

6:28 a.m

Espera, si te fuiste... ¿Cómo siguen tus cosas aquí?

6:28 a.m

El mensaje no fue leído y el tono se escuchó en la habitación de ambas.

— ¿En qué momento..? ¿Qué? — Estaba confundida. — Concéntrate Leo. Debes estudiar.

Una brisa se aire se sintió.

—¡Oh mierda! ¿Quién carajo abrió la ventana? — Se levantó de su asiento.

Y algunas hojas se volaron, dejando ver algunas preguntas y respuestas que Acuario había planeado para su estudio, exactamente de ese examen.

— Acuario... Te adoro. — Sonrió y comenzó a leer. — Cuando regreses te deberé la vida y futuro.

Escorpio salió de su habitación listo para comenzar su día como a las siete de la mañana y unos minutos más.

— ¿Tú?¿Tan temprano? — Rió. — Es seguro que logrará ese examen. Iré a cocinar, cuando puedas despierta a los otros, por favor.

— Claro, en un rato acabo... —Contestó sin desprender los ojos de las hojas sobre la mesa.

Pasó una hora más y Leo por fin había acabado y se sentía algo confiada y según ella eso indicaba que le iría fatal, pero Escorpio y sus compañeros le animaban.

— Vamos, estudiaste mucho tiempo y Acuario te prestó lo necesario. — Decía tomando un poco de refresco.

—¡Ah es cierto! Las notas de Acuario. Se la llevaré.

Acua. Te dejaré tus cosas en el cuarto, debo ir a ese examen.

8:35 a.m

Eh, consérvalas.

Salí a la biblioteca.

Suerte.
8:40 a.m

Oh, iré ahí luego del examen. Te veré luegoo.
8:41 a.m

—Escorpio gracias por el desayuno, me debo ir. — Tomó su bolsa. — Hasta... — Miró su teléfono. — Las once que regrese

— Está bien. — Dejó aquella sartén. — ¿Verás a Acuario?

—Claro... — Sonrió.

—Dile que gracias por los libros que me recomendó y también que venga antes de las nueve de la noche. — Miró hacía arriba. — Debo salir a las ocho de la noche.

— Claro. Se lo diré. —Corrió a la puerta.

El examen de Leo duró una hora y al parecer lo sabía completamente todo, lo que había estudiado unos días antes era exactamente lo mismo que estaba en las notas de Acuario y se sentía bastante confiada al realizar el examen, un sentimiento hermoso.