Maestro de la Muerte || Harry Potter

LXX

Las vacaciones de verano previas a su cuarto año fueron por decirlo las mas extrañas que Harry había tenido, al menos es esa vida. Y es que no hablaba solo por las reuniones políticas que tenia con Tom, en las cuales amaba ser el centro de atención de los lord mayores, si no que, al no encontrar a Dumbledore, los dementores seguían cazándolo y si, muchos seguían manteniéndose cerca de él en cualquier mansión donde la pasara y la presencia de Muerte (La cual ahora era más presente por los múltiples trabajos que Harry tenía) no ayudaba a que las criaturas lo dejaran solo

También descubrió que la presencia de Barty le gustaba, el Crouch menor siempre tenía algún tema de conversación, era demasiado curioso y siempre quería saber todo de más, si Harry no lo supiera creería que perteneció a Ravenclaw en lugar de Slytherin, Barty también tenía el aura divertida de los gemelos, le gustaba hacer bromas y la mayoría de veces los hermanos Lestrange caían en ellas, para Harry era tranquilizante como iba su vida

La huida de Dumbledore fue rápidamente olvidada de los periódicos, ahora la mayoría de noticas eran los cambios que Tom – Marvolo Gaunt – estaba haciendo en las leyes de Gran Bretaña ¡Y es que no solo había logrado cambiar el plan de estudios de Hogwarts! Ahora las leyes para las criaturas eran casi iguales a la de los magos, por fin iban a progresar como los demás países mágicos, las islas ya estaban muy anticuadas

Las cosas en la escuela cambiaron, Minerva era la nueva directora, por lo tanto, no podría seguir el siguiente año con sus deberes como maestra de transformaciones y jefa de la casa Gryffindor, Harry no sabía aún a quien pondrían en esos cargos, no era algo que le importaba.

Lo que si le importaba era que Thorfinn seguiría en su puesto de defensa, pero también en otra materia, Artes oscuras. Ya quería ver el rostro de los leones cuando notaran que iban aprender. Ese verano también aprendió que el maestro que daba historia era un mortifago – como no – Tom de verdad ya tenia bastante apoyo en el colegio, la materia de criaturas no le importaba quien la diera, después de todo el solo tomaba Runas y Aritmancia y esos los maestros seguían siendo los mismo

Una carta de Draco le había llegado ese día, con tres entradas VIP para el mundial de quidditch, no sabia que hacer, a Tom y Severus no les gustaba el deporte y ahora él sabia lo que pasaría, no le parecía interesante, pero a su Dragon le hacía bastante ilusión llevarlo ¿Tal vez podría llevar a Sirius? Era Luna llena, estaba seguro que no se separaría de Remus

Harry estaba acostumbrado al entrar a todas las habitaciones de la mansión Prince cuando quisiera – Menos a las que ahora era de Tom, no quería encontrarlos en medio del sexo otra vez, gracias – por lo que entro al despacho del lord, le diría que no podría estar en las próximas reuniones al estar en el partido, claro que eso nunca llego

"¡Maldita sea ustedes son como conejos!" Grito Harry fuerte y por completo sonrojado cuando levanto su mirada de la carta, gracias a esos dos adultos ahora entendía el deseo, ya había tenido unos cuantos sueños... sugerentes

Tom de inmediato detuvo el movimiento de sus caderas contra Severus, el pocionista estaba contra el escritorio y podía escucharlo reírse por la situación en que estaba ¿Harry los había encontrado tanto tiempo que ahora le parecía divertido?

"Bueno, tengo que aprovechar, Severus esta la mayor parte del tiempo haciendo pociones como yo en el ministerio" Dijo divertido Tom y lleno de orgullo

Harry solo balbuceo y dijo algo parecido a un "no quiero detalles" Volteándose para salir con su rostro y orejas rojas

"Me voy al mundial de quidditch con los Malfoy ¡Adiós!" Grito saliendo del estudio y cerrando tras él, escuchando la risa fuerte de los dos mayores dejándolo aun mas avergonzado ¿Sería tan bueno el tener relaciones? Era algo que no sabía y no estaba seguro que lo descubriera pronto