Capítulo XLVII

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Cuando la familia Park salió de Silla, Byeok ordenó que detuvieran el carruaje.

-¿Qué sucede, hijo? ¿Por qué lo detienes?- el rey cuestionó desconcertado.

-No podemos ir a Baekje, seguramente Agust irá a buscar a JiMin...- el hombre lo interrumpió:

-Lo amenacé, le dije que no pusiera un pie ahí...- ahora HaYan lo interrumpió:

-Padre, usted sabe cómo es Agust, es capaz de ir armado y con 50 guardias o más con tal de hacer lo que quiere, no podemos exponer a JiMin y al pequeño- explicó.

-¿Y qué sugieren que hagamos? ¿A dónde vamos?- la reina cuestionó.

-Podemos ocultarlo en algún hogar de clase alta en Baekje, podría resultar...- ahora fue JiMin quien interrumpió a su padre

-L-llévenme a Goguryeo- JiMin pronunció con dificultad.

-¡¿Qué?! ¡No! Queremos evitar una posible guerra allá, llevarte y que Agust se entere podría ser el inicio de todo- el rey no se preocupaba por eso, solo no quería que su hijo estuviera cerca de los plebeyos como Tae, HoSeok, Jin y Nam.

-Padre, seguramente ese será el último lugar en el que Agust lo buscaría, ahora Goguryeo es más seguro para él, por favor, llevémoslo pronto- Sandara pidió. El rey, no muy convencido, respondió:

-De acuerdo, estarás bajo los cuidados de tu mejor amigo JungKook, estarás bien ahí, pero también Sandara irá contigo, él me informará cualquier problema que haya, ¿de acuerdo?- tras escuchar eso, ambos hermanos asintieron, aunque JiMin hubiera preferido ser cuidado por HaYan, sin embargo, no tenía las fuerzas para discutir sobre ello- Llévenos a Goguryeo- ordenó a lo que el hombre tomó las riendas de los caballos y comenzó a guiarlos hacia Goguryeo.

-Por favor, sobrevive, no por mí, hazlo por Tae y YoonGi, ambos te esperan con demasiado entusiasmo, sería un golpe demasiado duro para ambos el saber que su bebé ha muerto por mi culpa- JiMin pensó mientras dejaba caer algunas lágrimas...

...

-¡Maldita sea! ¡Maldito seas, Park JiMin!- el pálido gritaba con desespero mientras tiraba y arrojaba cosas a la pared para romperlas, una vena le saltaba por el cuello y la frente de tan furioso que estaba, quería salir de ahí e ir a Baekje a matarlos a todos, pero sabía que ellos eran más y su probabilidad de ganar no era tanta.

De nuevo tiró y rompió su espejo, los pedazos de vidrio se esparcieron por toda la habitación, pero eso no le impidió seguir caminando de un lado a otro y seguir rompiendo cosas.

-Sí algo le pasa a nuestro hijo... ¡Si por tu culpa nuestro hijo muere, también te voy a matar, escoria! ¡Jódete, JiMin!- su plan de su vida "perfecta" se estaba yendo a la basura, no podía permitir que su imagen ante la sociedad se destruyera, era lo que más le importaba en ese momento.

En su mente solo imaginaba acabar con su esposo y la familia Park, pero debía esperar un poco más.

-Cuando mi hijo nazca te voy a matar, Park JiMin, a ti y a toda tu familia, te vas a arrepentir de todo- y tras decir aquello recordó algo importante, algo en lo que había estado pensando durante mucho tiempo. Tomó asiento en su cama y comenzó a pensar.- ERAN tu familia... Vendremos cuando mi nieto nazca para que sea formal el divorcio, mientras tanto olvida que tienes esposo e hijo...- esas palabras que el rey Park le dijo resonaban en su cabeza, lo hacía pensar en mil y un cosas que podría hacer.

Comenzó a reír de una forma un tanto psicópata, era una risa aterradora a oídos de cualquier persona, pero a oídos de él, esa risa le causaba satisfacción.

Imperio caído, amor destruido [YoonTae +18] {Omegaverse}Where stories live. Discover now