La Tercera Rama©──｢ɴᴀʀᴜᴛᴏ ғᴇᴍ｣

06|"Planta la Semilla y ve Como Fructificará"

Los personajes no me pertenecen, todos los derechos a Masashi Kishimoto; los edits tampoco, créditos a sus respectivos creadores.

Si quieren una dedicatoria pídanlo en los comentarios.

Ahora si, a darle con el capitulo.

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Cuanto tiempo había estado así ya, ¿quizás una dos?, o ¿quizás tres?, a Sakura no le importaba, donde quiera que miraba, lo único que sus ojos alcanzaban a ver eran los altos arboles, que se cernían aterradóramente sobre ella, no importaba a donde viera, o cuanto caminara, era todo lo que vería, musco, humedad, y arbole gigantescos, con profundas raíces, que daban indicaciones de que eran muy antiguos.

Aun así, no se desespero, o al menos fingió que no lo hizo. Estaba completamente aterrorizada, pero trato de pensar, usar su cerebro, que era de las pocas cosas como shinobi de las que podría realmente presumir, siempre había sido inteligente, y analizar había sido su mayor fuerte.

Sabia que debía hacer, o al menos que se suponía debí hacer, con el tiempo hallaría una solución a su situación, siguió caminando, desesperada por encontrar algo más que solo follaje. Ignorando todo lo que le habían enseñado Iruka-sensei en la academia, y sus lecciones de que debía hacer un buen shinobi si se encontraba en terreno enemigo, sin respaldo, y sin conocer el terreno.

Maldijo con sus dientes apretados a su nuevo maestro, Kakashi-sensei era un sádico, eso lo tenia ya claro, había despertado en medio del bosque, tirada en el suelo, su mochila a varios metros de ella, sin nadie a su alrededor, ni el equipo ninja que acostumbraba a llevar con ella. No tenia nada.

Así que había comenzado a caminar, buscando algo que ayudara a su situación, o su nuevo maestro apareciera, y le dijera que todo era una broma, y la llevaría a casa.

Sabia que esto no era lo solución, sus instintos se lo indicaron, su sensei había hecho esto por algo más, cuando la comprensión llego a su cerebro, algo hizo clic, y maldijo. Kakashi-sensei había tenido éxito en su estrategia.

La duda se deslizo por su cuerpo, como una serpiente arrastrándose por el suelo, durante años había aceitado ser la kunoichi mas inteligente de su clase, incluso podía apostar que la mejor, solo si Oshiruko no hubiera estado en su misma clase. Eso la lleno muchas noches y días de envidia, como los maestros la elogiaron no solo por su inteligencia, sino por su habilidad nata, que todo lo que hizo impresiono todos, esa actitud suya, tan genial, que era distante, pero a la vez tan respetuosa o amable, al hablar con las personas.

La había maldecido tantas veces con Ami, e Ino, celosas por quien era la chica Hyuga, aparte era hermosa, todas los sabían, la mayoría de los niños de su clase, a pesar del rechazo mostrado por las chicas, hablaban de la niña a su espalda, llamándola hermosa, genial, la mejor.

Niños mayores trataron de invitarla a salir, pero la Hyuga simplemente los despacho con miradas frías, y se alejaba. Ella a pesar de ser desterrada, venia de un clan de Konoha, uno de los mas nobles, poseía una increíble habilidad, y un Kekkei Genkai, todo lo que Sakura había querido en su vida, ahora esa misma niña, estaba en su equipo, y no sabia como tomar eso aun.

¿Qué demonios importaba si no sobresalías en lo físico?, ella era inteligente, el poder físico no lo era todo, sin embargo, rodeada de miles de kilómetros de bosque aterrador, esas palabras sonaban vacías, sin efecto alguno del cual regodearse. Ahora comenzaba a maldecirse por ese pensamiento tan estúpido e ingenuo de su parte.

Para que le serviría los miles de libros que había leído, si no podría ejecutar esas cosas por ella misma. Allí fue cuando algo más la golpeo, ¿ella era tan débil? no creía que Oshiruko, o Sasuke tuvieran tales problemas.