WICKED HATE | FRED WEASLEY (traducción)

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AMIGA DE LA FAMILIA
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Charlie Weasley se concentró en mí por un momento fugaz y luego volvió a mirar a su hermano, con una sonrisa confusa.

— ¿Tenemos visita?

Los ojos de Fred se movieron de mí para mirar a su hermano, sacándome de mi ensimismamiento.

— Sí, ella es Lilith Lupin. Una amiga de la familia.

Lilith Lupin. Era la primera vez que me presentaban como Lupin... Pero la emoción y los latidos acelerados de mi corazón no duraron mucho, de hecho, cesaron cuando Fred dijo la segunda mentira: una amiga de la familia. No su amiga con beneficios, no alguien especial. Una puta amiga de la familia. No sabía que te follabas a los amigos de la familia, Frederick.

Estreché la mano de Charlie, tratando de sonreírle a pesar de que las palabras de su hermano.

— Encantada de conocerte.

— Tu nombre me suena. ¿Nos conocemos? — preguntó con curiosidad.

— No, no creo. Pero soy una Arpía y hemos ganado la copa de esta temporada, tal vez eso te suene.

— ¡FRED! — La voz de la Sra. Weasley sonó desde afuera asustándonos a todos. — ¡VEN UN MINUTO! ¡TÚ PADRE NECESITA AYUDA CON LOS HECHIZOS DE PROTECCIÓN!

El mencionado puso los ojos en blanco y dándome una última mirada rápida y casi imperceptible, abrió la puerta listo para irse de nuevo;

— ¡YA VOY, MAMÁ!

Noté como Charlie se dejaba caer en el sofá y me miraba con curiosidad, haciéndome dar la vuelta para enfrentarlo.

— Entonces, Lilith, ¿verdad? — comenzó, dándome una sonrisa amable pero un poco sospechosa. — ¿Te importaría explicar por qué mi hermano ha mentido?

Me quedé muda, desconcertada por sus palabras. ¿Cómo sabía que Fred había mentido?

Pareció adivinar mis pensamientos porque su sonrisa se ensanchó.

— Conozco a Fred casi tan bien como George. No puede engañarme.

— Bueno, si que soy una amiga de la familia, en eso no ha mentido — aclaré después de respirar profundamente. — Pero digamos que tengo una amistad mucho más cercana con él.

— Espera...— Algo debió hacer click en su cabeza porque arqueó las cejas sorprendido — ¡Así que tú eres la chica que Bill dijo que tenía a nuestro hermanito babeando!

— ¿Bill dijo eso? — pregunté bastante sorprendida por la elección de palabras del hombre.

— Más o menos. Más bien dijo que había cierta chica que tenía la mente de nuestro hermanito un poco ocupada. Lo demás lo he agregado yo después de ver cómo te mira.

— Lupin tampoco es mi apellido real — confesé.

— Lo sé. Remus no tiene hijos, y cuando dijiste que eras una Arpía conecté los puntos. Déjame adivinar, Arambella, ¿verdad?

Asenti.

— Pero legal y oficialmente Lupin.

— Me gusta más.

— A mi también.

— ¿Y en qué casa has dicho que estabas? — preguntó, bastante curioso.

— Nunca lo he dicho.

— Bueno, ahora es un buen momento para hacerlo.

Resoplé, sonriendo. — Slytherin.

— ¡Oh Merlín, entonces eres la misma chica de la que Fred hablaba hace unos años! ¡Debería haberlo sabido! Se pasaba el día hablando y hablando de lo mucho que te odiaba. Y miraros ahora... Maldita sea, ¿qué hacen las hormonas?