I. Nivel

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TAEHYUNG

— Sistema iniciado, luces encendidas, cortinas desplegadas, iniciando alarma hora 6:00 a.m. — se escuchó decir a la voz algo artificial por los altavoces en la habitación, que casi como si tuviera vida propia se movía orquestada por dichas órdenes. La alarma con un sonido lo suficientemente estridente para despertar al chico que aún dormía, comenzó a sonar colándose especialmente a la habitación contigua.

Y no tuvieron que pasar más de cinco minutos para que un castaño con pasos pesados pero rápidos abriera la puerta de la ruidosa habitación casi estampándola contra la pared, de no ser por el sistema que evita el daño y la violencia. Dicha acción junto con un pequeño pitido anunciando un mensaje recibido hicieron al castaño respirar por unos segundos para calmarse y no lanzar lo primero que encuentre al chico que aún dormía plácidamente ignorante de la alarma. Misma que no iba a callar sin el escaneo matutino a su dueño.

— Taehyung — llamó entre dientes el castaño caminando hasta la cama para tirar la manta que abrazaba desordenadamente el menor — te prometo que si no despiertas te echaré un vaso con agua — masculló molestándose un poco más debido a una nuevo mensaje recibido en su reloj de muñeca, por lo cual comenzó a remover al contrario con ambas manos.

— Aún no es hora Seokjin, no mowlestes — la voz grave y somnolienta casi no se escuchó entre el alboroto que comenzaba a formar la alarma al subir el volumen. Puesto que su tarea era despertar a su dueño subiría el volumen hasta lograr su cometido.

— Es por esto — enfatizó — que ahora necesito asistir a meditación ¡Kim Taehyung! tu persistente alarma me estresa cada mañana — se quejó a un pasó de comenzar a gritar removiendo con más fuerza al menor, al punto de tirarlo al lado contrario de la cama.

Entre un grito de sorpresa y susto el menor de ambos por fin se levantó con el ceño fruncido tratando de recuperarse y ubicarse en su entorno, la luz mañanera del sol lastimando sus ojos aún no acostumbrados a la luz — Te acusaré con mamá — reprochó con ese tono algo caprichoso digno de un niño mimado.

— ¿Ya están despiertos? ¿Por qué tanto alboroto y aun no bajan? llegarán tarde — apareció la madre de ambos impecablemente arreglada, ya que pese al delantal de cocina no dejaba de lucir elegante.

— ¿Por qué de pronto todos se reunieron aquí? — apareció por el pasillo el padre acomodando los botones de la manga de su camisa mientras veía curioso a su hijo menor, una casi copia suya donde además se podían apreciar los mejores rasgos de su esposa.

— Taehyung siempre despierta tarde y me arruina el día con el horrible sonido de la alarma, ni siquiera quitó la voz automática de Adora que habla antes de hacer cada cosa — dijo Seokjin con su tan habitual queja matutina.

— Apenas pasaron unos minutos — murmuró Taehyung frotando exageradamente sus ojos mientras dejaba que Adora lo escaneara por el aparato ubicado en la parte superior del espejo gigante del ropero.

— Pasa siempre y-

— Ya cariño, no te estreses — interrumpió su madre con una caricia al rostro de su hijo mayor — si quieres dejar la terapia tendrás que evitar recibir más alertas de enojo han sido muchas y el otro día Adora me dijo que debía involucrarme más con la salud mental de mis hijos.

— Hm, Seokjin aguanta un poco más ¿Bien? Ya programé la mudanza para la próxima semana, lo único que falta es que vayamos a escoger el nuevo apartamento mañana, seremos los primeros en escoger así que yo también estoy emocionado — explicó el padre de abrazando a su esposa mientras todos lo escuchaban.

— ¡Por fin! — exclamó emocionado viendo a su hermano rascarse despreocupadamente — solo pido la habitación más lejana de este — dijo señalando a su hermano para luego caminar de salida — al fin tendré paz.

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⏰ Última actualización: Feb 19, 2022 ⏰

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