Flufly

XVII

—Su pedido ya está listo.— La vendedora le acercó la caja de terciopelo dejando ver el producto.— ¿Los va a querer separados o juntos?

—¿Qué opinas?

—Separados.

La mujer se retiró dejando a Momo y Katsuki.

—A Eijirou le va a encantar.— Comento la alfa.— Has hecho un buen trabajo.

No tuvo respuesta pero supo que el alfa estaría bastante avergonzado debido a que ni le miraba.

La alfa recibió lo pedido y se despidió para ambos salir del edificio.

...

Sus exámenes habían acabado el jueves y sus calificaciones ya habían sido entregadas el viernes por la mañana, Eijirou se sintió realizado cuando vio todas sus materias académicas aprobadas y obtenido los puntos necesarios en sus pasantías, ahora solo le quedaba esperar a la graduación que se realizaría el miércoles y decidir a cual agencia integrarse para iniciar su labor de héroe, tenía al menos un mes para decidirlo mientras tanto se va a permitir disfrutar de su logro.

Ahora se encontraba con Katsuki yendo hacía él orfanato y visitar a Yeji y Niki después de bastante tiempo.

—Te extrañe mucho.— Le dijo la menor mientras abrazaba al Omega.

Niki por otro lado solo se inclino a modo de saludo recibiendo una caricia en la cabeza de parte de Katsuki y uno en la mejilla de parte de Eijirou.

Los cuatro se reunieron con el resto de los niños y pasaron la tarde jugando, aunque los mayores y Katsuki se dirigieron a la cocina para preparar una merienda con ayuda de algunas cuidadoras.

En todo ese rato que estuvieron, Eijirou volvió a sentir incomodidad ante la misma Omega que había visto el primer día que llegó y la forma en la que parecía querer estar cerca de Katsuki, incluso lo siguió a la cocina. Quitó todo mal pensamiento y siguió con lo suyo aunque estaba ligeramente inquieto e inseguro.

Fue que antes de irse del orfanato Katsuki detuvo a Eijirou y le pidio a Niki y Yeji que se encontraran a solas.

—Supe que su cumpleaños fue hace unos días— Saco una caja de terciopelo rosa y otro azul marino y se los entrego por separado.

Yeji salto de emoción cuando vio la pulsera con adornos de color rosa y le agradeció a alfa dándole un abrazo.

—¡Es muy bonita! Gracias, alfa.— Le sonrió.

Niki por otro lado apretó los labios, se retiró algunas lágrimas cuando estás le traicionaron y sorbió la nariz. Eijirou estaba enternecido y no dudo en acercarse y consolar al cachorro Omega.

—Gracias.— Dijo el cachorro ocultando su rostro dejando que el Omega le consolara.

Niki no dejaba de observar la pulsera con piedras de azul claro, le gustaba mucho su regalo y su corazoncito se sentía conmovido.

—Es de parte mía y de Eijirou.

El Omega se sonrojo pero no dijo nada y dejo que ambos niños le agradecieran.

Se despidieron y la pareja comenzó a caminar de regreso a dónde se estaban hospedando.

—¿Cómo supiste del cumpleaños de Yeji y Niki?

—La directora lo comento la última vez que venimos.

—Me siento mal por no haberme enterado.

—No tienes porqué, les estás dando el regalo que más necesitaban.