PETEXVEGAS

Fuera de peligro

POV VEGAS

Entramos en el hospital corrí junto a los médicos que llevaban en la camilla a Pete decían que había muy pocas probabilidades, hablaban entre ellos pidiendo un montón de medicamentos mientras seguían moviendo la camilla.

La escena se reproduce en mi cabeza.

Conducía a toda velocidad cuando escuché que habían encontrado al traídor era momento de hacerme cargo, no dejaría que mi padre me siguiera humillando y le demostraría que tengo los huevos para hacer lo que el no puede.

Mire la ubicación en la pantalla de mi auto, gracias a Pete pude dar con el lugar porque le coloque un rastreador en el celular que usaba para solo comunicarse conmigo.

Cuando estaba cerca distingo la figura de Pete y a un sujeto corriendo veo que por más que acciona no suenan disparos por lo que entiendo que se le han terminado las balas, piso el acelerador con fuerza mientras me dirigí hacia el auto que está apunto de arrancar y me impacto contra el.

Salía humo de ambos autos baje bastante aturdido porque no me encontraba en la mejor de las formas, mire a Pete su rostro se veía aliviado y entonces un sujeto levantó su arma y disparo por detrás.

Mis ojos se abrieron.
El tiempo se detuvo y ví caer de rodillas a Pete.
Nos miramos, el se veía tan asustado que olvide como respirar, mis piernas no respondían y mi voz había desaparecido, mi corazón se detuvo.

Después lo ví caer al suelo en menos de micro segundos llegué a su lado.

—Pete por favor mi amor quédate conmigo "!— lo sostuve entre mis brazos mientras lloraba.

No me importaba nada de lo que pasaba a mi alrededor bien podrían dispararme y no me hubiese importado.

"Bang"

Un disparo Kinn y compañía llegaron pero eso no me importaba.

Todo el mundo se acercó a nosotros pero Pete solo me veía a mí.

Su sonrisa esa bella sonrisa aún estando al filo de la muerte me la estaba mostrando.

—Vas a estar bien—

Porsche estaba hincado frente a mi mientras acariciaba la cabeza de Pete, Kinn dijo que la ayuda estaba en camino pero yo no podía parar de temblar y llorar.

—Señor por favor no puede entrar"!—

Intento llegar hasta Pete todo lo que me importa ahora está en una puta mesa fría y quiero estar ahí y acompañarlo hasta el último momento.

—Basta Vegas hay que esperar"!— Kinn me sostiene por la cintura con fuerza yo comienzo a debilitarme y caigo en el suelo.

Siento una mano sobre mi hombro y levantó mi rostro es Khun, se hinca a mi lado y entonces nos abrazamos con fuerza.

Este loco y yo estamos sufriendo en este momento, no nos importa quien nos está viendo lo único que queremos es consolar al otro tratando de no sentir que nuestro mundo se cae a pedazos.

Pasaron horas.
Ahora estamos esperando los resultados.

—Señores—

Una enfermera sale y su semblante es neutro.

—El está fuera de peligro—

El alma nos volvio al cuerpo.

—Les dije que mi novio era el mejor doctor"!—

Khun estaba feliz.

—Puedo verlo?!— Yo necesitaba estar con él.

—Aun no, estará en cuidados intensivos perdió mucha sangre tuvimos que reanimarlo la bala atravesó pero no salió de su cuerpo lo que provocó hemorragias internas así que por el momento deben esperar—

La enfermera hizo una reverencia y se marchó.

—Sabes que es lo bueno de tener un novio Doctor...—

Khun me sonrió y tocó mi hombro.

Al poco tiempo estaba completamente vestido de un traje especial Pete tenía tubos conectados por todas partes pero seguía aquí y eso era lo que me daba fuerza para no volverme loco.

—Te amo Pete— acaricie su mejilla no podía estar mucho tiempo ahí así que le di un beso en el cabello y salí de la habitación.

Ahora solo quedaba esperar.

Camine hasta donde estaban Kinn y Porsche.

—Donde está el traidor?— pregunté lo más calmado que pude, quería ver sangre debían pagar por lo que le había sucedido a Pete.

—Aqui—

Kinn me dió la dirección.

—No irás solo si suelta información necesito estar ahí—

Kinn parecía cansado.

—Entonces vamos—

Porsche hablo decidido.

—Sera mejor que tú no...—

Kinn se veía bastante tenso, pues sabía que no sería nada linda la visita que haríamos.

—Ire Kinn Pete es mi amigo—

Cuando Porsche daba una orden se cumplía, si Kan supiera que uno de sus mejores hijos era domado por semejante guardaespaldas probablemente le daría un infarto.

Salimos del lugar y nos dirigimos hasta el bastardo que provocó toda esta situación.