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Ha pasado un día desde que vi a la hermana de Evan, y no se porque pero cada vez que salgo o voy a la escuela tengo la sensación de que todo iba a empeorar.

Pedí permiso por una semana, lo cual un compañero me cubrió, no quería tener problemas.
Así que me estado dedicando a la pintura. Tengo un pequeño deseo, y es participar para poder ganar.

Pero no tengo nada.

Nada.

Suspiro pesadamete y dejo los lápices sobre la mesa. A través de la ventana veo a Apolo que me está viendo, el me sonríe y me da un saludo con la mano, a lo cual yo correspondo.

De un momento a otro desaparece de la ventana.

¿Pero que planeas Hidalgo Tonto?

Dejo que pasen los minutos y para eso yo me encuentro asomada en mi ventana. Apolo sale con una polera blanca y unos shorts color beige que le quedan bien para esto va descalzo con si nada.

Me río al ver qué se golpea con la baranda de la casa - eso es por no usar sandalias.- le dijo a lo cual él alza la vista.

- eres muy cruel- dice cruzándose las manos

- me lo dice seguido Raquel- digo como si nada

- muy graciosa Julieta- me dice

- ¿Julieta?- pregunto

- desde aquí pareces Julieta, y yo Romeo-

- y después ellos dos mueren, mejor omitamos eso, además que es muy romántico-

- es una de mis especialidades querida - me dice y luego corta una pequeña flor del jardín - puedo pasar?- pregunta a lo cual yo me dirijo dejándolo con la palabra casi en la boca para ir a abrirle la puerta.

- además de darme está diminuta flor tienes alguien propósito para estar aquí?- digo tomando la flor y dejando que pase dentro de la casa.

- Pues quería pasar tiempo contigo.- dice alzando la ceja consecutivamente.

- Niño tonto- digo subiendo las escaleras, Apolo me sigue hasta entrar a mi habitación.

- WOW, nunca había entrado a un cuarto tan colorido- dice al ver mi habitación, la observa con atención.

- pues bienvenido a mi pequeño mundo de la creatividad- digo antes de caer boca arriba sobre mi cama.

Apolo me ve y sonríe nuevamente- y cuando será el día que voy a verte dibujar?-

- el día de hoy no, no tengo inspiración - sigo suspirando pesadamete.

- bueno pues- Apolo saca su teléfono de su bolsillo- internet está lleno de inspiración- dice después de unos momentos mostrándome la pantalla de su cel.

Tiene una de las obras más famosas de van Gogh la famosa noche estrellada.

- algo muy bueno, pero - Apolo me interrumpe.

- podrías hacerlo en mi-

No era una pregunta lo estaba afirmando, Apolo Hidalgo quería que le hiciera el dibujo en él, pero que.

- podrías usarme como tú lienzo- me dice a lo cual abro los ojos como platos.

No se ni que decir- podría ser, pero para mí es un tanto complicado- sinceramente lo es.

Pero en eso se me ocurre algo- podrías ser mi modelo!- y eso justamente lo que necesito para mí lienzo

- pues lo que diga usted señorita pintora- dice alegremente.

- a pintar se a dicho- me levanto y comienzo a sacar una gran caja en donde guardo mis pinceles y pinturas que me han regalo por años

Apolo se agacha junto a mi y ve mi gran tesoro- valla, esto si que es sorprendente, tienes de todo, hasta esto- dice sosteniendo tizas negras, no tengo mucha experiencia usándolas pero me gusta-

- si bueno, no soy muy buena con eso pero si con los pinceles -  le confieso.

- me imagino- dice volviendo a sonreir.

¿Pero que le pasa?
Por qué cada vez que sonríe siento una punzada en la boca del estómago.

Hidalgo Tonto.
Por qué sonries tanto.

- bien, necesito que te acomodes en esta silla para comenzar-

- ¿alguna ves has tenido aún modelo?- me pregunta Apolo.

-Eres el primero y espero hacerlo bien-

Que comience la pintura.

𝐸𝑙 𝑢́𝑙𝑡𝑖𝑚𝑜 𝐻𝑖𝑑𝑎𝑙𝑔𝑜. Apolo y tú.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora