Demasiado Dulce ♡ [Kamado Tanjiro x Oc]

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¿No te ha pasado que de repente tuviste un sueño con tu crush donde hacias algo vergonzos y ahora no quieres, o más bien, no puedes verlo a la cara?

¿No? Bueno, entonces a Aiko si le pasó. 

Acompañame a ver esta triste historia.

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Ante el estrés de la universidad sumado a la vergüenza de la pesadilla del otro día, todos sus esfuerzos por ser valiente y enfrentar a su crush se fueron por la borda y ha regresado al inicio, lastimosamente. Pero con que cara puede ir y saludar a Tanjiro-san luego de soltar esa... esa pendejada. 

"A veces no estás tonta, sino pendeja" Se regañó mentalmente. 

Ahora está tomando la ruta más larga para tomar el bus que la deja a dos cuadra de la Universidad en contraste al otro que la dejaba al pie, todo por la cuestión de orgullo y vergüenza ajena, alias el cringe, del terrible sueño. Gracias Destino, se le quiere. 

Dejando la trivialidad del momento, Aiko se encontraba ayudando con las copias de su profesora a cargo, la respetable Ubuyashiki-san, profesora y coordinadora de la carrera de diseño de interiores, aunque Aiko no sabía que existía coordinadora en su carrera y solamente aplicado para Arquitectura, le sorprendió conocer la sugerencia de la profesora Ubuyashiki. 

—Aquí están las copias que me pidió, y el catálogo de texturas.— La castaña le entregó delicadamente sobre el amplio escritorio de la oficina de la profesora, la cual se giró sobre su silla y miró con una sonrisa a su querida asistente. 

—Gracias, Aiko-san.— La profesora se dedico a tomar en sus manos al grueso catálogo y antes de que su asistenta se marchara, le pidió un favor.— Una vieja amiga me había pedido un favor, pero quería saber si Aiko-san cuenta con tiempo disponible. 

—Claro profesora Ubuyashiki. ¿Cómo le puedo ayudar?— Mencionó la castaña de manera servicial. 

—Un amigo de mi conocida ha decidio remodelar un local de... me parece que era para una cafetería, creo que esta ubicada en las avenidas principales de XY y Z.— Ante la información, Aiko abrió sus ojos diciendo que era bastante cerca de donde vivía. — Claro, sería de mucha ayuda si podría ir mañana en la tarde a revisar el lugar y conversar con el dueño del local para escuchar sus sugerencias y algunas opciones que podría haber. ¿Podrás?

—Claro, sensei.

—Muchas gracias Aiko, aunque este favor no puede ser remunerado economicamente, hablaré con Liliana para que cuente en tu registro como horas laborales, si mal no recuerdo aún no tomas las prácticas profesionales.— Aiko nego con su cabeza.— Entonces cuando tomes la materia, ven directamente conmigo para trabajar en conjunto. 

Aiko no podía estar más feliz de tener una recomendación personal por tal prestigiosa maestra. Además, no aguantaba las ganas de tomar un proyecto como práctica profesional y comenzar a trabajar enseguida. 

"No aguanto las ganas de conocer el lugar a donde trabajaré"

A la mañana siguiente, Aiko tuvo tentación de buscar primero el lugar para luego regresar en la tarde, pero mejor se guardó la sorpresa para después de las clases de la universidad. Y tal como hizo, pasó su jornada de estudio y no dudo en tomar un taxi y llegar al local. Aunque la ruta era demasiado conocida, quiso engañarse que tal vez es un lugar diferente a la famosa "panadería" que ella bien conoce, sobre todo la puerta. 

Sin embargo quedó impactada cuando el taxita la dejó al pie del lugar que no quería volver a pasar hasta superar su trauma y cuando estuvo frente a frente al local, una conocida voz le saludo mientras se abría la puerta. 

—Bienvenida... oh vaya, eres tú.— Sip, el panadero que evitaba a toda costa la recibía con los brazos abierto. 

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Definitivamente, una de las escenas que más me gustó escribir hasta ahora, además del cap 2. Sobre todo porque sé que Aiko quedó como payasa al final cuando le toca trabajar con Tanjiro XD

El destino y las ancianitas hacia Aiko: 

Luego me das las gracias.