¿Quizás...? (2)

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Echo mi cabeza hacia atrás y suelto un largo suspiro mientras muevo mis cabellos. Hacía algo de calor en sala de estar y ya me estaba comenzando a sofocar. Miro de un lado para otro en la habitación, pasando mis ojos por las figuras desconocidas. No recordaba el nombre de nadie, exceptuando por el carita de príncipe con sonrisa graciosa y creo que unas chicas. Ya habían pasado un par de horas y con suerte llevaba la mitad de mi segundo vaso.

Tecleo una respuesta rápida a algo que Jeno me dijo, aunque sinceramente no estaba poniendo mucha atención.

Lucas se había ido por ahí hace unos treinta minutos y yo estaba parada en el mismo sitio hace cuarenta  más. Los juegos que habían hecho para "calentar el ambiente" fueron totalmente ajenos a mi, ya que en ninguno fui dejada jugar. Pero no me molestaba del todo, tampoco tenía muchas ganas de ser parte.

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Uy....Lo siento, ¿ibas a ser pareja de Lucas? Es que Hierin ya está con él, ¿no te molesta esperar? Yo sé que no, aprovecha de traer más botellas, qué te parece? —La peli roja sonríe y se acomoda al lado de un chico.

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Además, me sentía algo incómoda al estar toda la noche con la mirada de dos chicas encima. Lucas no había dejado de tomar mi cintura en todo el rato después de que terminó el juego y hasta hace unos momentos que desapareció, siendo la misma cantidad de tiempo que la más baja de las dos había estado fija en mi.

—Y dime, ¿qué relación tienes con Lucas? —Pronuncia la chica de melena roja, jugueteando con un dulce en su boca. —Digo, algo deben ser para que te haya traído a la fiesta.

—Sólo amigos. —Respondo girando con cuidado el contenido de mi bebida.

Nos conocimos en una fiesta en la cual terminé llorando en frente de un chico que recién conocía.

—¿En serio? ¿Estás segura que nada más? ¿Te gusta Lucas? —Continúa la chica bombardeando con sus preguntas. —Es extraño, porque a Lucas le gusta Hierin...

—Ya basta Yorum, no la asustes. —La corta la rubia mirando sus uñas.

No sabía si eso lo había hecho por mi o por ella misma.

La de cabellos cortos bufa y rueda los ojos, yéndose del lado de nosotras para ir a jugar con el que creo se llama Kun.

No diré que me alegro de que se haya ido, pero me alegra que se haya ido. Su voz me estaba comenzando a irritar.

—Hace calor. —Habla un poco después Hierin. —¿Quieres fumar? Acompáñame afuera.

Quizás fumar un poco me haga bien, me baja la ansiedad.

La chica se apoya en la muralla a un costado de la piscina y hago lo mismo para descansar mi espalda. Los cigarrillos que ella fumaba eran mucho más fuertes que los míos o quizás el hecho de haber dejado de fumar por unos meses, me hizo más sensible al aroma.

Pero son ricos, tienen menta.

—¿Realmente no tienes nada con Xuxi? —Inquiere la rubia mirando el agua. El reflejo de la piscina daba justo en su rostro, viéndose más pálida y destacando aún más el rojo de sus labios.

—No, no tengo nada con él.  —Respondo al soltar el humo.

¿Cuál es la insistencia con eso? De verdad que ya me estaba arrepintiendo aún más de venir.

—Lo supuse, no eres su tipo. —Esta responde botando algo de ceniza. —Y tampoco pareciera ser el tuyo.

—Ahm...supongo. —¿Qué se supone que le responda?

Nos vemos después; (Lee Jeno)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora