propuesta laboral

Capítulo 19.

Al ya estar listo el almuerzo pude ver como el abuelo de Tae-mo hizo una mueca de felicidad, pero al verme hizo una de asco.

—Me conformó con... Esto, al menos es comida—Dijo mirando la comida con asco.

Yo bajé la mirada avergonzada.

—Abuelo, ¿Puedes sólo no ofender?—Dijo mirándolo con reproche.

—Pero ahora todos están en mi contra—Dijo haciéndose la víctima.

Yo solo callé y me dediqué a comer, no quería hacerle vueltas al problema.

Al escuchar el sonido del timbre pude ver como el abuelo se levantaba sonriente corriendo hacia la puerta.

—Puede que sea una visita—Dijo Tae-mo susurrando hacia mí oido.

Yo asentí dándole la razón.

Mi cara de enojo se hizo presente al ver. La estúpida de Hyo-ri.

—¡Hola, abuelo!—Gritó chillando así abrazando al abuelo de Tae-mo.

Yo hice una mueca viendo a Tae-mo quien bajaba su mirada de pánico.

Ella al adentrarse a la gran casa pudo vernos allí sentados, ella me vio con asco al verme allí al lado de mi novio. Pero al ver a mi novio su rostro se formó en una sonrisa maliciosa.

—Pero miren a quien tenemos aquí, pero si es mi cariñito—Dijo yendo corriendo a abrazarlo.

El la recibió con pánico, yo lo mire con odio. Pude per como el señor embozaba una maliciosa sonrisa al verme hacer una mueca.

—Les presento a Jiwo Hyo-ri, Hyo-ri te presento a esta chiquilla—Dijo mirándome con reproche.

—Claro que la conozco, no es mas que una aprovechadora, una arribista, una muerta de hambre—Dijo mirándome con burla.

—¡Callate!—Grité enojada—¡No voy a permitir que me hables de esa manera!—.

Ella abrió la boca ofendida.

—El que no permitirá que grites a mi cuñada será yo, estas bajo mi techo sin siquiera invitarte—Dijo alzando la voz.

Yo le volví la mirada a Tae-mo, el solo bajó la mirada sin decir nada.

—Tae-mo me lo permitió, quería que almorzaramos en paz—Dije avergonzada.

—¿Es verdad, Tae-mo?—Dijo mirándolo fulminante.

Tae-mo solo me vio con disculpas.

—¿Querías que viniera, Tae-mo?—Dijo mirándolo enfadado.

—No quería que se quedara sola, es solo por eso que la traje—Dijo bajando la mirada.

Mis ojos se llenaron de lágrimas al oírlo.

—¿Necesitas que te lleve a la salida?—Dijo el señor mirándome con burla.

—Tae-mo... No tengo donde irme, solo llévame a casa y si quieres desapareces—Dije haciendo una mueca.

El abuelo miró hacia Tae-mo, el solo negó con la mirada baja.

—Vete sola, Suni. Hazlo sola por una vez en tu vida—Dijo hablando tan cruelmente que dolía.

Yo asentí botando lágrimas, camine hacia la puerta rápidamente sin siquiera mirar atrás.

Llevaba en brazo mi bolso, no llevaba nada más que diez malditos dólares, solo eso.

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Tae-mo no se había comunicado conmigo para nada, ahora mismo lo odiaba, lo odio más que a mí familia.

¿Acaso el amor duele?
No, el amor no dolía; el amor nunca dolería.

Veía las imágenes en su Instagram, el sonriente mientras ella lo lo besaba muy cerca de sus labios.

Yo solté un sollozo al ver eso, más y más imágenes de como el hacía lo mismo.

Vi como Ha-Ri y Young-seo vinieron corriendo hacia donde yo me encontraba.

Ellas al verme hicieron una mueca de tristeza, me abrazaron diciéndome que todo estaría bien, pero yo ya estaba rota por dentro.

Maldita sea, hablo del dolor como si estuviera tan bien. Odio todo esto, odio ver como siempre elije a los demás, como siempre seré su segunda maldita opción.

Amaba a un idiota que sabía como hacerme sentir mal.
Después de esto me llamara solo porque se siente solo, solo porque sabe que esta solo.

Maldlitos y más malditos novios. ¿Es que acaso finge amarme? ¿Es que acaso no soy suficiente? 
Me siento una estúpida, ver como siempre regreso a él.

"Necesitamos hablar"

Tan solo hace unos minutos estaba bien, claramente mentía. Pero el mensaje, ese maldito mensaje no daba mucho de ayuda. No, nunca lo haría.

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Sentándos en una mesa grande separados por el espacio de madera.

—No está yendo bien, nada de nosotros está yendo bien, Suni—Dijo cabizbajo.

—Podemos arreglarlo, podemos pasar esta etapa y hacerlo bien—Dije quitando mis lágrimas.

—No, Suni. No, esto ya no da para más. ¿Que no puedes entender eso?—Dijo mirándome con lágrimas en los ojos.

Yo negue soltando un sollozo.

—Yo te amo, Tae-mo. ¿Podrías amarme solo una vez más?—Dije sollozando.

—No te avergüences más, Suni. Yo.., yo la amo, desde hace semanas, desde hace doce semanas—Dijo soltando leves lágrimas.

Yo levante mi mirar, lo vi arrepentido.

—¿Que? —Dije, ¿acaso me había hecho infiel?

—Suni, ya no te amo—Dijo mirándome con lástima.

Yo negue sollozando, lo vi levantarse ya listo para irse.

—¡No me dejes, por favor!—Dije sollozando, abrazándolo.

—Yo te amo, te amo mucho—Dije sollozando.

—No te humilles de esa forma, ya no te amo, Suni. —Dijo empujandome.

Cai al suelo de espalda, lo vi como se iba sacando sus lágrimas.

El amor que el sentía por mí se había apagado..
Ya no me amaba, ya no lo hacía..