Capítulo 42
"He's just the first one"
La chica llevaba poco menos de media hora de rodillas junto al cuerpo de su amigo que empezaba a sentir sus piernas adormiladas, las lágrimas corrían por sus mejillas pero no emitía ningún sonido, habían tratado de hablar con ella pero esta no quería escucharles parecía perdida en sus pensamientos, aturdida por lo ocurrido.
Había presenciado como asesinaban a su mejor, tal vez, único amigo, movió al chico para recargar sus hombros en sus piernas flexionadas y retiraba delicadamente el pelo que caía sobre la frente del chico. Por su condición no vio o mas bien no notó como Elijah y Klaus iniciaban una pelea a base de palabras que terminó con golpes y Klaus explicándole a su hermano el porque había actuado así, Elijah lo amenazó que más le valía que pasara como aquella vez. Mientras esto ocurría la chica notó algo fuera de lo normal en el bolsillo del saco de Wesley, lo tomó dubitativa y con las manos ligeramente temblando sacó el pequeño papel y lo desdobló dejando a la vista una caligrafía perfecta con la leyenda "El sólo es el primero, ¿quieres salvar a los que amas? Nos vemos en el cementerio" sólo decía eso, no indicaba ninguna hora ni sitio en específico. ¿Iría? No le traía un bien presentimiento, pero tal vez era lo mejor para todos. Volvió a doblar el papel y lo atoró entre los cordones de su vestido cuando vio una sombra acercarse.
Elijah se arrodilló a la altura de la chica intentando que ella le viera o captar un poco de su atención.
-Ameliia-la llamó pero no hubo respuesta. Puso su mano sobre la de la chica que estaba sobre el pecho del muchacho y ella finalmente reaccionó deshaciéndose del contacto, algo que sorprendió al vampiro, ella lo miro por unos momentos fijamente como si a quien estuviera viendo fuera a un completo extraño.
-Ameliia, vamos tienes que levantarte, no puedes dejar a Wesley aquí-habló con el tono más suave que le permitió su voz, ella asintió sin decir palabra alguna y con el mayor esfuerzo se levantó sintiendo sus piernas más pesadas por todo el tiempo que había estado en esa posición. Elijah esperaba que lo que le había dicho Niklaus fuera cierto e ocurriera lo mismo, sin el mayor esfuerzo tomó al chico en brazos y lo subió a una de las habitaciones de huéspedes esperando alguna pregunta de la chica pero no la hubo.
Cerró la puerta tras de él, la chica estaba con las manos en el barandal otra vez con la mirada perdida, nuevamente puso su mano sobre la de ella en señal de apoyo pero esta vez no se alejó y entrelazó sus dedos sin decir palabra alguna. Se sentía seca, como si no pudiera derramar una lágrima más, sus mejillas estaban rasposas de las lágrimas secas.
-Ameliia...- empezó Elijah pero fue interrumpido.
-No digas nada-dijo con una voz que fue como un susurro que se desvanecía en el aire. Elijah no supo que hacer más que envolverla con sus brazos, ella tardó en corresponderle entrelazando sus manos detrás de la espalda del Original.
Al sentir la presencia de alguien ambos se separaron, Klaus estaba a unos metros de ellos con una mirada que demostraba nada menos que arrepentimiento, al verlo la chica sintió como un nudo se formaba en su garganta y su estómago se estrujaba, un sentimiento que nunca había sentido con tanta intensidad, odio.
La expresión de la chica cambió radicalmente no quería ver a esa persona ni en pintura, al menos no por el momento.
-Sólo necesito que me escuches-dijo con su mejor tono, y no esperando mucho tras haber visto como cambiaba el rostro de Ameliia al verlo.
-No quiero hacerlo-respondió tajante.
-Por favor-se podría decir que Klaus estaba rogando, una parte de él no quería que la chica pensara de él de esa manera-Tienes que saber porque lo hice.
