Problema Con Los Uchiha... (Old)

XVII. Mañana con un Uchiha.

Hoy era uno de esos días libres que tenía, uno de esos días en los que no tenía nada que hacer.

Con pasos lentos camino por la aldea, las miradas y susurros no sé hicieron esperara. A medida que avanzaba, la gente se desplazaba a su alrededor, se negaban a estar cerca de ella.

Sus pasos la llevaron hasta las afueras de aldea, dónde esperaba tener un día tranquilo. Camino al campo de entrenamiento que los Uchiha compartían con ella. No se había dado cuenta antes, pero ese lugar era hermoso, había un arroyo con el agua más cristalina que había visto y los árboles con las hojas más verdes.

Se sentó a la orilla del pequeño arroyo, se inclino hasta estar con sus dedos hundidos en el agua. Cerro los ojos esperando relajarse y que el tiempo pasara rápido.

- ¿Qué haces aquí tan temprano? - Una voz tranquila y familiar sonó.

Naruko giro su mirada, los ojos azules captaron a un azabache que la miraba con duda. En su cara se extendió una pequeña sonrisa.

- Buenos días Itachi-senpai... No hago nada en específico - Luego del saludo y la respuesta, la mirada de la rubia volvió al arroyo.

- No parece eso - Añadió, el cuerpo del azabache se movió hasta estar en también sentado a la orilla del arroyo.

Naruko no respondió, era muy en la mañana y estaba cansada. No había dormido mucho por sus pesadillas y ahora solo quería permanecer callada antes de que tuviera que comenzar con sus labores matutinas.

El silencio se extendió, para Itachi fue un poco incómodo ver a la energética y agresiva rubia tan callada y tranquila.

- ¿Qué hay con los otros dos? - Pregunto luego de un rato.

- ¿Hablas de Sasuke y Shisui? - Pregunto el azabache obteniendo un asentamiento en respuesta - Madre se llevó a Sasuke a un entrenamiento y Shisui fue obligado a ir al hospital para un chequeo antes de ser reintegrado al servicio activo ninja - Itachi explico tranquilo, la rubia solo asintió.

Su mirada volvió al cielo, se había hecho más tarde y ya era la hora a la que el mercado abría. Se levantó del césped, se limpio un poco la tierra y se giro hacia donde estaba el azabache.

- Fue... ¿Linda?... La conversación que tuvimos, pero ya tengo que irme - Naruko agitó su mano de un lado a otro para despedirse.

- ¿Puedo preguntar a dónde vas? - Pregunta el azabache, el no era alguien de meterse en la vida de los demás pero realmente tenía curiosidad.

- Al mercado, a intentar conseguir mis alimentos - Respondió con un aire de decepción.

- ¿Intentar? -

- Si... Tal vez no lo sepas pero mucha gente se niega a venderme y otros simplemente me cobran de más -

Itachi frunció el ceño, disgustado con las palabras de la rubia.

- ¿Porqué? - Itachi no pudo evitar preguntar.

Naruko hizo una mueca, no quería que Itachi, Shisui o Sasuke se enteraran del zorro y se alejaran de ella. El azabache noto la angustia en la cara de la pequeña gennin, con cuidado puso su mano sobre el hombro de la rubia, tratando de brindar algo de consuelo.

- No tienes que responder si no quieres - Hablo suave y bajito, sintió que si su voz subía demasiado podía herir los sentimientos de la rubia.

- S-si, preferiría no responder - Naruko respondió, un poco apenada.

El silencio duró segundos, Naruko dió una sonrisa una se movilizó para irse. Itachi la vio, tenía algo de tiempo libre, ¿Porqué no usarlo para ayudar a una amiga?