you're my story (Draco Malfoy)

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Y tal como terminaron los mundiales, Leah y Theo se fueron del lugar lo más rápido posible, sin siquiera dejarle a la chica despedirse de George.

Y tal como ocurría, tal como había dicho la abuela de Theo, los mortífagos aparecieron llamando con la marca tenebrosa en el cielo aterrorizando a todos los presentes.

La chica intentaba tranquilizar a su amigo durante lo que quedaban de las vacaciones, no obstante el chico cada vez tenía más miedo de lo que podía suceder en un futuro.

Así mismo, ambos chicos subieron al tren, esperando encontrarse con sus amigos. Estaban algo perdidos pues no veían rastro de ninguna cara conocida.

Fueron al vagón donde solían juntarse y bingo. Ahí se encontraban Blaise, Pansy y Draco.
—¡Chicos! ¡Que alegría veros! Menos mal porque estos dos tortolitos no paran, me dan ganas de potar.— exclamó el moreno yendo con los que acababan de entrar.

—¿Tortolitos?— preguntó Theo mirando cómo Draco y Pansy hablaban. Pasó su mirada a Leah y esperó la reacción de esta.

¿Por qué le costaba tanto admitir que a Pansy le gustaba Draco? ¿Por qué le daba tanta rabia que Blaise se haya referido a ellos como tortolitos?

Quiso hablar y saludar a su amigo, pero no podía apartar la mirada del platinado quien se dio cuenta rápido de esto. Le sonrió de manera burlona haciendo que la chica empezara a sonrojarse levemente.
—Tengo que ir a hablar con mi hermano.— fue lo único de dijo para irse de allí casi corriendo.

El moreno miró a Theo el cual intentaba no reír. El castaño miró a Draco el cual suspiró para seguir hablando con la peli negra la cual se veía muy entusiasmada.
—Esto será divertido de ver.— murmuró para si mismo para sentarse junto con Blaise y así pasar el trayecto.

¿Hablar con su hermano? ¿Desde cuando Leah ponía excusas tan tontas? Eso pensaba el platinado mientras miraba la ventana y hacía que escuchaba a Pansy.

Y la verdad es que la conocía muy bien. Leah no sabía ie hacer porque estaba claro que no iría con Harry.
—Que tonta eres Leah, ahhg.— se maldecía a sí misma mientras daba vueltas en círculo y pensaba que hacer.

—Leah...— mencionó una voz detrás de ella riéndose.— ¿Qué haces?

La Slytherin miró a Cho la cual ya la miraba de manera divertida. Se puso nerviosa pues que vergüenza que la viera en esa situación, no obstante volvió a actuar natural.
—Pensaba en cosas... nada impotente. ¿Que tal estás?— le preguntó ahora viéndola.

La Ravenclaw le mostró sus dulces.
—Iba a encontrarme con Cedric, le traigo dulces, ¿quieres venir? Estamos con los de quidditch.— explicó esta.
—Oh, no... tranquila, yo... estaba esperando a mi hermano.— se inventó esa excusa sin pensarlo.

Que idiota, pensó de nuevo.
—¿Harry? Lo acabo de ver con Ron. Están por allí.— mencionó señalando con su cabeza los vagones Gryffindor.
—¿En serio? Um... entonces nos vemos por ahí...— balbuceó para empezar a caminar hacia el compartimento donde se encontraba su hermano.

Simplemente desastroso.
—¿Leah?

Bendita salvación. Pensó ella.
—George.... oh, no eres George.— dijo al ver a Fred solo por los pasillos del tren.— ¿Qué haces solo por aquí?
—No se donde se ha metido George, así que lo busco. ¿Que haces que no estás con Malfoy?— preguntó con intención de molestarla.