𝐑𝐄𝐕𝐄𝐍𝐆𝐄 ||| [ʜᴀɴᴢᴜ]

- Love Revenge -

La sala de reuniones se quedó en completo silencio cuando la noticia salió de los labios de Hanma, Ran no podía creerlo y Rindou tampoco, Mikey simplemente ignoraba el hecho de que su único omega en la organización ahora estaba comprometido con otra persona.

—¡Que puta mierda significa eso!

Exclamo con fuerza el Haitani mayor, el alfa se había exaltado golpeando la mesa con un estrepitoso golpe, Sanzu le miraba impasible, sosteniendo su vientre con protección, había pasado alrededor de un mes y medio desde que se había casado con Hanma, no se había divorciado o roto el acuerdo nupcial porque estaba seguro de que la situación podría ser usada a su favor por supuesto a Hanma no le molesto, incluso si era ocupado como venganza podía tomar lo que siempre había querido.

—Significa que no me casaré contigo tontito —se burló el peli-rosa, dejando a Hanma darle un rostro de superioridad a su ex, Kokonoi suspiro pesadamente él no se había molestado únicamente porque la boda no fue exuberante y lujosa como quería, aunque ahora planeaba el bautizo de la primera cría de la manada, siendo el único además de Hanma que ya sabían del estado en cinta del omega.

—¡Ese no fue el acuerdo!, ¡Te ordeno que te divorcies!

—Tú no puedes ordenar nada aquí Ran, el líder soy yo, y si Sanzu escogió a Hanma en lugar de ti entonces deberías solo perderte y dejar de hacer drama, hay cosas más importantes que discutir —sentenció Mikey, el silencio reino después de ello, la orden del alfa dominante apaciguo un poco a los demás.

Y la junta continua sin más interrupciones, pero al final no pudo evitar que Ran le jalonará hacia atrás evitando su completa salida de la instalación. —Que diablos crees que estás haciendo —susurró con rabia murando directamente a sus orbes celestes—. Irme a trabajar, tengo cabezas que cortar antes de tomar mi descanso —pronuncio apropósito el peli-rosa ganándose un reproche más del oji-violeta sumado a un jalón—. Me dejas para casarte con ese demente, y además, ¿Qué diablos es eso del descanso?, piensas irte de luna de miel —Ran presiono más fuerte su muñeca antes de pronunciar mordaz aquello, el ceño del Akashi dejó de ser suave para convertirse en un silencioso rostro de juicio—. En primer lugar tú fuiste la zorra que me engaño, no vengas a decir idioteces, me case con alguien que me pudo dar más que unos míseros momentos de atención, y en segundo lugar, no, no me voy a ir de luna de miel, es licencia por paternidad.

Finalizo, con el rostro inflexible el albino antes de retirar el brazo que le aprisionaba de un manotazo.

—¿Tú que?

Ran parecía espantado con la nueva noticia cuando Haruchiyo sonrió, de esa forma que lo hacía ver demencialmente hermoso y letal, de esa forma que había llamado su atención en el primer momento.

—Estoy en cinta, seis semanas, no te emociones, coinciden con los tiempos en los que me enrede con Hanma, puedes creer que fue tan decente que acepto hacerse cargo —le provocó, con una sonrisa socarrona, el peli-morado no pudo más que morder el interior de su mejilla con aquello.

—Él no te ama, no te ama como yo.

—Tú no me amas, no sabes que es amar Ran, y yo tampoco, no me caso con Hanma por amor, me caso con el porqué me dio más de lo que pudiste haberme dado tú —señaló él, echando su melena rosada tras su hombro—. Sanzu…

—No, esta es mi vida, voy a hacer con ella lo que se me plazca, Hanma me complace ahora y es solo mío, es suficiente, así que no me molestes más, ni a mí, ni a mi cachorro.

Sentenció.

Quizás esta solo era una venganza de amor, quizás esto solo era una forma de desquitarse de Ran, pero el fondo también quería descubrir si podría amar a aquel que a su vista parecía tan bueno para él, y que no parecía estar queriendo juzgarlo hasta por respirar.

Ver a Hanma con su rostro sereno, pero la sonrisa loca era reconfortante de alguna forma, no sabía que era amar, pero quizás, estaba dispuesto a descubrir si podía hacerlo.

Toco con cuidado su vientre aun sin crecer demasiado.

Incluso si no era a Hanma a quien amara, o incluso si era él y a su hijo. No importaba, ahora que la posibilidad de descubrir el sentimiento era de verdad. Sanzu, podría estar haciendo una venganza de amor. Pero también lo estaba descubriendo.

De alguna retorcida forma.

FIN