¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Cuando despertó no tenía ni idea de qué había pasado con la chica que le había dado el apoyo para avanzar. No estaba ahí. Una sensación molesta en su estómago la invadió. Pero no le tomo importancia. Ella era de esa manera. Escapando y apareciendo en el momento más oportuno.
También notó que el seguro en su puerta ya no estaba. Posiblemente obra de la rubia.
Tanteó su cama como queriendo verificar que sus ojos no estaban teniendo alguna falla. ¿Había escapado de la misma forma en que había entrado? No estaba segura de ello, pero sabía que su abuelo no la había visto. De lo contrario ella no habría seguido durmiendo tan cómodamente.
Shuhua tomó todas las energías que necesitaba para correr a su escuela. Tenía ese sabor amargo por no lograr despedirse de la rubia y por más que lo evitara, la plática con Soojin seguía haciéndola confundir.
Intentó saludar a Yontararak en la entrada y esta solo le dio una expresión que no supo identificar. Era un avance. Los anteriores días solo pasaba de largo como si su lugar estuviera vacío.
Miyeon le hizo un comentario sobre el mar humor de la hermana de su personaje a admirar.
Shuhua por su parte evitó hacer comentarios sobre ella, sabía que solo estaba tratando a Soojin como si necesitara su protección.
Durante las clases se dignó a hablarle para pedirle un bolígrafo prestado. Al menos no se lo negó, pero el ambiente seguía siendo incómodo. Más que cuando ni siquiera se conocían.
De Soojin no tuvo muchas noticias. Al menos no hasta la noche.
Había terminado el día y se encontró recibiendo una gran decepción al llegar al puente y ver su soledad tan presente. Soojin no estaba ahí. "Quizá volverá en unos días" pensó ingenuamente al recordar su anterior escapada. Aún no había descubierto que había hecho en ese tiempo.
Pensó que quizá fue cierto lo de ir a visitar a su padre. Le habría gustado ir con ella y darle su apoyo.
Después de cenar dijo a su abuelo lo de siempre. Debía estudiar y no quería interrupciones.
Justo al momento en que pensó en dormir, escucho de nuevo el golpeteo en su ventana. Pero lo que la hizo sonreír fue ver a Soojin con un casco de ciclista. Al abrir la ventana escuchó a la chica con un tono bastante alegre.
─Vamos a decir adiós.
Sólo quizá, su primera locura había sido abrirle la ventana a su pretendiente más divertida.
Y como se esperaba, terminó llevándola con ella sin olvidar poner el pestillo en la puerta. Había sido una completa locura escalar por los árboles del amplio jardín para llegar a la ventana, pero era aún peor bajar por el mismo sitio secundada por una chica que jamás había hecho algo parecido.
─Tenemos toda la noche para ir a que te despidas de tu padre. ─ Soltó al fin cuando llegaron a donde se encontraba la bici.
