CAPÍTULO 4

404 16 0
                                    

                LA CENA DEL EQUIPO

El equipo de Barcelona estaba cenando en un restaurante de alto prestigio y reconocimiento. El director técnico había ido a pedir la carta.

Pablo miraba como sus redes sociales aumentaban de seguidores. Y se sorprendía de la variedad de fotografías que le fueron tomadas en distintos partidos. Todas estas imágenes inundaban el internet. De repente se acercó Pedri, quien era el mejor amigo del jugador. Que por cierto también pertenecía al mismo equipo.

—¿Que haces Pablo? —con una pequeña sonrisa.

—Solo miro la cantidad de seguidores que tengo.

—Son muchos.

—Si. La verdad su apoyo me incentiva a seguir adelante —sonriendo.

—Eso es lo bueno de los seguidores.

En ese momento llegó Amelia, quien era una conocida del jugador. Los saludo y se sentó en una asiento vacío que había a lado suyo.

—Pablo vi tu reciente foto en tu perfil. Está demasiada divina.

—Gracias Amelia ¿Cómo llegaste hasta aquí?.

—Una gran seguidora del equipo y tuya sabe a qué restaurantes van.

—Amelia, no deberías estar aquí —dijo Pedri—. El director técnico se molestará. Esto es solo una cena del equipo.

—No importa también me puedo unir a ustedes.

—Creo que Pedri tiene razón. Deberías irte. Otro día podremos platicar.

—Claro que no. ¿Dónde está el director técnico? Voy a hablar con él.

—Enserio Amelia, deberías irte —insistía Pedri.

Entonces el director técnico apareció y trajo la carta para que los jugadores puedan pedir el plato que más prefieran.

La joven se paró, y fue hasta donde estaba él.

—Buenas noches. Soy amiga de Pablo ¿Será que puedo quedarme a cenar con ustedes? .

—Buenas noches señorita. Disculpe pero esta es una cena exclusiva del plantel.

—Pero es necesario que me quedé, porque tengo un tema personal que arreglar con Pablo.

—Eso lo pueden arreglar fuera del restaurante —con una cara seria.

—Es de demasiada urgencia.

—Esta bien. Pero solo puede ser hasta un cierto tiempo. Que le parece solo hasta que termine de cenar.

—Es más que suficiente para mí. Gracias.

La muchacha regreso a su asiento y le contó a Pablo lo que le dijo el director.
El joven estaba sorprendido por la habilidad que su amiga tenía para convencer a las personas.

Cuando el equipo recibió los platos que pidieron. Amelia empezó a conversar con el jugador, ya que le restaba solo unos 10 min.

—Pablo, vine porque quiero que mañana vayamos a la fiesta de un amigo.

— ¿De que amigo? .

—De Miguel, ya te había comentado sobre él. Será en la discoteca.

—Gracias Amelia por la invitación, pero no creo que pueda.

— ¿Porque? —con un tono de voz molesto.

—Porque tengo una reunión mañana a esa hora.

—Pero no creo que dure tanto. Yo te puedo esperar.

—No enserio Amelia, solo te haré ilusiones.

—Igual eso lo tomo como un si. Mañana te espero en el stadium.

—Pero no dije nada —con un gesto de sorpresa.

—Ya aceptaste. Ahora adiós.

La muchacha se despidió de todos los integrantes del equipo. Incluído del director técnico. Agradeciendo por el tiempo.

Pedri miraba que su amigo tenía una cara de preocupación e incomodidad. Entonces se acercó a él.

—Gavi, deberías ponerle un freno a esa chica.

—No creo poder hacerlo.

—Si puedes. ¿No ves como de impulsivo es su comportamiento?.

—De hecho si lo es. Pero sabes que ella es una de las primeras conocidas que tuve.

—Pero eso no es excusa para que te siga manipulando.

—Tienes razón. Nuevamente le diré que no podré ir. Pero eso será mañana.

Pedri deseaba que esa chica se aleje de su amigo, ya que era demasiado engreída. Incluso una vez se sintió celosa de un grupo de admiradoras que se cruzó por la calle. Ella las había espantado y tratado mal. Incluso llegando a los insultos. Amelia era una chica que realmente nadie la comprendía.

LA CANCHA DEL AMOR  - Pablo Gavi- FanficDonde viven las historias. Descúbrelo ahora