▪︎Cap 4: Vida de manada▪︎

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P.O.V. Narradora
Aquí damos un salto de tiempo, nuestro pequeño Marshall ya no es un cachorro, sino un adolescente, el había sido entrenado todo ese tiempo con la manada de Timber para ser un cazador como los otros lobos, ahora tenía 10 meses lo que en la edad humana serían 14 años, había crecido en tamaño y su collar comenzaba a apretarle el cuello pero el no podía hacer nada al respecto, ya había intentado todo, pero por más que lo mordiera o lo jalara no lograba quitarselo, el cuero del collar era demasiado resistente, ya se había acostumbrado a tener esa presión alrededor de su cuello, pero ese no era su único problema, el había pasado por mucho durante esos meses, eso incluía ser subestimado por sus origenes como perro doméstico, burlas, bromas pesadas, entre muchas cosas más, pero a pesar de todo aún conservaba un poco de la personalidad bondadosa y amable que tenía cuando era un cachorro, pero siguiendo las reglas que aprendió, por ejemplo, ya no se comportaba como perro, sino como lobo, le gustaba morder cosas, ahora cazaba animales en vez de jugar con ellos, aullaba a la Luna y siempre huía cuando alguien trataba de acariciarlo o acercarse a el, Timber aunque no lo demostrara se sentía orgulloso de el.

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Ahora vamos al presente, donde Marshall se encontraba con los otros cachorros, ya también crecidos cazando en un pequeño grupo, su sentido del olfato también se había agudizado así que podía oler una presa potencial desde muy lejos.

Marshall: Huelo algo, muchachos.

Cachorro: Bien hecho amigo, vayamos.

El dálmata siguió el rastro hasta que llegaron a una parte del territorio donde vieron a un ciervo pastando.

Marshall: Es de un buen tamaño, si logramos atraparlo alimentaremos a toda la manada, ahora ustedes vayan por los lados y yo atacaré por el centro.

Los jovenes lobos asintieron y se dispersaron mientras que Marshall se agachó y se empezó a acercar lentamente a su presa hasta que salió corriendo de los arbustos y saltó sobre el para morderle el cuello, el ciervo intentó resistirse pero salieron los otros 3 lobos y lo inmovilizaron en el suelo mientras que el dálmata mordió con más fuerza hasta que finalmente el ciervo dejó de moverse y el perro soltó su cuello.

Marshall: Buen trabajo, ahora llevemoslo a la guarida.

Entre los 4 arrastraron al animal hasta llegar a la guarida.

Timber: Buen trabajo niños, por su trabajo los dejaré comer primero.

Marshall: Gracias Timber.

El grupo de jovénes tomó su parte y luego el resto de la manada se acercó para comer.

Timber: Por cierto niño, de una vez te digo, tu entrenamiento casi termina, pronto tu y los demás obtendrán sus nombres.

Marshall: ¿De verdad? Genial.

Marshall se fue a un rincón para recostarse y descansar, también su torpeza se había ido, ahora todo debía tomarselo enserio, el día transcurrió relativamente normal para el, no tuvo más tareas ese día hasta que en un momento vió a dos lobos de la manada regresar arrastrando a un lobo que el nunca había visto.

???: Timber, encontramos a este pulgoso en nuestro territorio robando comida.

El lobo marrón le gruñó al invasor.

Timber: Con que robando comida ¿Cómo te atreves? ¿Acaso crees que es tan fácil venir y robarnos?

Black: ¿Que hacemos con el?

El Alfa le hizo una seña con la cola a Marshall y este se acercó.

Marshall: ¿Si, Alfa?

Timber: Matalo.

Marshall se quedó pasmado al oír eso, Timber quería que el matara a alguien, no sabía que hacer en ese momento.

Marshall: ¿Qué?

Timber: Ya escuchaste.

Marshall: N-No, no puedo yo..

Timber: Lo sabía, sigues siendo ese perrito llorón y cobarde ¿Cierto?

Esas palabras resonaron en su cabeza "Llorón y cobarde", en ese momento la ira lo invadió y parecía que toda pisca de empatía que tenía se había ido, el ya estaba harto de que lo llamaran así, ¡No era un llorón! ¡NO ERA UN COBARDE! ¡EL ERA UN LOBO, Y AHORA ACTUARÍA COMO TAL! Dijo para si mismo antes de lanzarse sobre el invasor y clavar sus colmillos en su garganta, el lobo chilló de dolor y como pudo se lo quitó de encima y corrió, mientras que Marshall fue tras el, invadido por completo por la furia lo único que quería en ese momento era acabar con aquel lobo hasta que este cayó muerto unos minutos después por la gravedad de la herida, al ver su cuerpo, Marshall sintió una gran satisfacción y regresó con la manada.

Timber: ¿Y bien?

Marshall: Lo maté.

Timber: Bien hecho, sabía que decirte eso funcionaría.

Marshall: Espera ¿Me dijiste eso a propósito?

Timber: Por supuesto, sabía que eso sacaria tu instinto salvaje, esto es bueno, te estas convirtiendo por completo en uno de nosotros.

Sus 3 amigos lo elogiaron por su victoria, Marshall en cierto modo se sentía feliz, durante su tiempo en los Paw Patrol nunca lo habían felicitado tanto como ahora, por primera vez en mucho tiempo se sentía útil y querido, ahora sentía que el no pertenecía con los Paw Patrol, el pertenecía al bosque, con los lobos, después de todo ahora era uno.

El resto de la manada también lo elogió, ellos también lo habían aceptado como uno de los suyos ya que había demostrado ser un digno miembro para la manada y más ahora que sabían que era capaz de matar a los enemigos, el sería un excelente luchador para defender los territorios y dentro de nada recibiría su nombre de cazador junto a los demás lobeznos.
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CONTINUARA....

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