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Dato importante que había olvidado mencionar, para que tengan una mejor idea, Chuuya se convirtió oficialmente en Detective un mes después del incidente, luego a la semana fue la reunión con Kouyou y los hermanos Akutagawa, se podría decir que ya ha pasado mes y medio más o menos a lo largo de la historia.

Ha si, aviso... esencia de Vainilla.
Disfrútenlo :p

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Sintiendo su conciencia más liviana, creyó iba a seguir mejor con su vida, tal vez más sencilla de lo que fue en sus días en la Mafia, pero al menos tenía compañeros que le respaldaban y a alguien que le hacía sentir completo. Su relación con el castaño iba bien, casi parecían personas ordinarias con una historia romántica recién empezando y no unos usuarios de habilidad con una larga historia detrás que solo podía reafirmar que estaban destinados s permanecer juntos, sin importar cual fuera la circunstancia.

Últimamente había agarrado el hábito de pasar la noche con Dazai, ya sea viendo películas, bebiendo o solo conversando, y posteriormente debido a la flojera -y usando la excusa de la hora - de marcharse, su compañero terminaba por quedarse a dormir, tanta era la costumbre que ya incluso había ropa de él en el armario de Chuuya. Ambos estaban experimentando una vida bastante pacífica y cómoda, solo eran ellos sin el constante terror de morir en una misión.
Sus interacciones no pasaban de besos candentes donde uno de los dos terminaba parando la situación, uno buscaba un momento muy especial, y el otro que su contrario le diera alguna señal que le indicara estaba bien continuar y dar otro paso.

Y aquí nos encontramos, aprovechando el tiempo de tener unos días libres luego de una misión que duró dos semanas por lo complejo del caso donde aparte de ellos también asistió Kunikida, fue que Fukuzawa les premió con días de descanso.
Fueron a un lado apartado de la playa a tener una cena bajo las estrellas, donde pasaron rato agradable recostados en una manta mientras contemplaban el cielo, siendo acompañados por el sonido de las olas y los grillos de fondo, mientras tenían una amena charla, en la cual el castaño se encontraba extendido a lo largo de la tela mientras el pelirrojo se encontraba a su lado con la cabeza apoyada en el hombro de su contrario.

- Y luego Atsushi llegó hecho una furia, pero le dije que había sido idea de Rampo, así que no le quedó de otra que resignarse a aguantarse su enojo - terminó de contar.

- Deberías dejar al chico, de haber estado ahí te habría golpeado.

- Ahhh... Siempre tan paternar con los huérfanos Chuu~

- No lo soy - replicó golpeando suavemente el pecho del contrario -... ¿Qué te parece si probamos el agua? Nunca me he metido al mar de noche.

- Mmm... - hacía frío a decir verdad, pero esas orbes zafiro que le miraban expectantes le hicieron débil al tomar su decisión -. Hagámoslo.

El mayor no tardó en separarse para comenzar a desvestirse, porque sería incómodo luego estar con toda su ropa mojada y la posibilidad de pescar un resfriado. Yendo solo en ropa interior se adelantó un poco, esperando con los pies ya en contacto con el agua fría que Dazai fuera con él, al llegar a su lado y gracias a la luz de la luna es que se dio cuenta que seguía con las vendas puestas. No hubo ningún comentario al respecto, solo tomó su mano y se adentraron hasta que el agua le llegaba a la mitad del torso.

Ers un sensación tan inefable, era un cúmulo de ideas y emociones, estar en el mar de noche se sentía irreal, compartir un momento tan fuera de lo convencional al lado de tu compañero de toda la vida lo hacía aún más especial, el ser unos inmorales a ojos de la sociedad y haberse desnudado casi por completo en un lugar público le agregaba esa pizca de emoción que siempre les había cautivado cuando se reunían. Era estar en una realidad distinta al resto.

Sanar •[Soukoku]•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora