Diecinueve

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KARA

Si Kara pensó que Leighton había desaparecido antes de su pelea, ahora realmente se había ido. Un campus de apenas mil personas, y aún así, Kara nunca vio a Leighton, ni siquiera de pasada. Trató de que no le importara.

¿Y qué si Leighton pensaba que Kara no sabía cómo estar en una relación? Tal vez ella tenía razón. Kara había tenido una pareja seria y él la había engañado. Todo eso era cierto. No excusaba la forma en que Leighton le había hablado, como si fuera estúpida. No excusaba la forma en que Leighton se había convertido en fantasma una vez que comenzó a salir con Nyssa. Puede que Kara no supiera cómo estar en una relación, pero sabía que eso no significaba abandonar a tus amigos.

No necesitaba saber cómo ser vulnerable o estar en una relación para follar a la madre de Leighton. Se imaginó, brevemente, diciéndole eso a Leighton. Sin embargo, solo sería por despecho. Mira, yo también puedo ser un amigo terrible. Pero si Leighton sabía lo que estaban haciendo Kara y Lena, tendrían que parar. Además, Alex la asesinaría, probablemente, y a Kara podría no importarle perder la amistad de Leighton, pero no estaba dispuesta a perder la de Alex.

Leighton y Alex estaban pasando las vacaciones de primavera juntos visitando a Oliver en Chicago. Alex había invitado a Kara, vacilante, pero Kara se había disculpado. No porque hubiera sido incómodo, ella y Leighton tratando de ser amigables, o Kara intentándolo, de todos modos, no estaba segura de cuál era la posición de Leighton en todo el asunto.

Se había disculpado porque ya tenía planes para las vacaciones de primavera.

Dos noches en Boston, pagadas por United Aerospace Laboratories. La iban a llevar a una entrevista para lo que básicamente era el trabajo de sus sueños.

Tuvo que mentir, solo un poco, en la entrevista telefónica, sobre la escuela de posgrado. Una empresa en Boston no iba a contratar a alguien que quisiera ir a California al final del verano. Así que Kara había exagerado su solicitud para el MIT. En realidad, no estaba mintiendo: se había postulado para el MIT. Últimamente, ni siquiera se sentía como la peor opción.

Caltech estaba solo un poco lejos.

Había estado lejos de Alex durante los primeros tres años de universidad. Más de dos horas de distancia.

En la universidad, Kara nunca esperó sentir nostalgia. Ni siquiera le gustaba su ciudad natal. Regresaba durante los descansos solo para ver a los Danvers; no había pasado una sola noche en el tráiler de su madre desde que se dirigió a Midvale. De alguna manera, dos meses después del primer año, extrañaba tanto a Alex que la llamó llorando, solo para escuchar su voz. Alex había aparecido en el campus ese fin de semana, una sorpresa improvisada para que karay se sintiera mejor.

No podrían hacer eso si Kara fuera a Caltech.

Kara estaría feliz. Le encantaría lo que estaba estudiando, y eventualmente haría otros amigos, probablemente. Pero no podría subirse a un auto y conducir a Alex en un día. Ese conocimiento la hizo dudar de lo que había pensado que era su sueño desde que era una niña.

No le dolió saber que si conseguía este trabajo en la UAL, la ayudarían a pagar sus estudios en el MIT.

Y tal vez ayudó que Lena también estuviera cerca de Boston.

Kara no le había dicho a nadie excepto al profesor Jonzz sobre la segunda entrevista. Ni siquiera le había contado a nadie sobre la entrevista telefónica, había sido justo después de que Leighton le gritara o lo que sea. No habían estado hablando, y todavía no lo estaban, y ella y Alex habían estado hablando torpemente sobre Leighton y evitando activamente hablar sobre Leighton, por lo que la entrevista no había surgido.

Se cometieron errores (Supercorp)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora