Te Buscaré En Cualquier Realidad

La Cena.

Narra t/n.

Cinco me llevo a mi habitación para que pudiera descansar un rato por el largo viaje. La cena seguía en pie, pero en este momento solo podía pensar en dormir un poco.

Dormí solo dos horas, lo suficiente para tener energía para la noche, cuando desperté Cinco no estaba supuse que estaba abajo así que salí a buscarlo pues no tenía nada de ropa adecuada para una cena, cuando bajaba las escaleras alguien toco mi hombro y mi reflejo fue dar un pequeño grito.

-disculpe señorita no quería asustarla- Cúando volteo a ver quien me habla veo a un, ¿simio? Si, era un simio, llevaba un traje puesto lo cual me sorprendió más.

-No te preocupes, se que sonara incómodo pero eres un.. Un- no pude acabar la pregunta cuando el río ligeramente y me contestó sin más.

-Si señorita, soy lo que soy, el amo Cinco puede contarle la historia después, me llamo Pogo, es un gusto conocerla- Sonrei con la mirada baja algo apenada.

-mucho gusto Pogo ¿Sabe donde está Cinco?-

-tuvo que salir a la oficina, pero me pidió que la llevara a escoger su Vestido, el amo Cinco se encargo de comprar varios de ellos, usted solo debe elegir uno-

-¿de verdad? ¿Y donde los dejo? - pregunto sorprendida.

-Sígame por favor, espero le hayan dado una calurosa bienvenida-

-Por su puesto, con un toque de tensión e incomodidad en el aire pero si qué fue calurosa- recuerdo el abrazo de Klaus -especialmente de Klaus-

-Si, el joven Klaus tiene una manera, peculiar de ser, por decir lo menos, es buena persona-

Llegamos al pasillo donde se encontraba mi habitación y otras dos a un lado, pero justo enfrente de la mía había otra.

-esta habitación era del amo Cinco- dijo al tiempo que abría aquella habitación, pude ver que sobre la cama estaban los vestidos que me habia comentado.

-Bueno señorita la dejo a solas para que pueda alistarse para la cena, si necesita algo no dude en llamarme, el amo Cinco pidio estrictamente qué le diera la mejor atención-

-Muchas gracias Pogo- le sonrio amablemente.

Pogo salió de la habitación y yo regrese mi mirada a los vestidos, todos eran hermosos era difícil escoger uno, de verdad que Cinco tenía buen gusto.

Después de un rato por fin hize mi elección, me decidí por uno azul rey con tirantes estilo seda, era hermoso.
Tome el vestido de la cama y salí de la habitación, me dirigía a la mía cuando escuche que alguien subía las escaleras me acerque pensando que era Cinco pero era su hermana Allison.

-¡Oh! pensé que era Cinco- contesto nerviosa.

-Hola t/n, y no, solo soy yo- se encoje de hombros con una sonrisa.

Las dos nos quedamos en silencio hasta que vuelve a hablar nerviosa.

-!Oh! Cierto, estoy aquí por que Cinco me pido que te ayudará a arreglarte-

no podía creerlo, Cinco le pido ayuda a todo el mundo, por un lado me sentí bien pues era lindo que quisiera que me cuidaran o algo así, pero por otro lado no me gustaba, yo estoy acostumbrada a hacer todo yo misma.

-Muchas gracias Allison, pero no es necesario- contesto amablemente.

-Vamos t/n no seas tan modesta, para mi sería un placer pasar tiempo con mi cuñada- me sonríe divertida - anda ven, qué no tenemos mucho tiempo- hizo ademán de que la siguiera, solté un pequeño suspiro y fui detras de ella hacia mi habitación.