Fuego y Sangre: Aemma Velaryon

Romance

•King'sLanding

—Mi media hermana parece no haber aprendido nada, mis lores— dijo Aegon mientras todos los hombres de su consejo y su madre lo miraban—He recibido noticias diciendo que Rhaenyra ha declarado a Aemma como su heredera... Lo cual sin duda alguna, es una completa estupidez—.

—¿Que piensa hacer al respecto, majestad?—.

—Lo que debí haber hecho la misma tarde que el bastardo murió. Ir por la cabeza de mi hermana y la de todos los  hijos que le quedan—.

—Creo que estás exagerando, Aegon. Y olvidas que los hombres aquí presentes no volveran a derrochar tantos recursos como lo hicieron hace meses—.

—¿Te parece que exagero, madre? Hice lo que me pediste, ¿Acaso no perdoné cada ofensa que se cometió contra mí y la dejé vivir vivir como exhiliada en Rocadragon?— Alicent solo miraba a Aegon quien parecia molestarse cada vez mas—¿Y como me paga ella? ¡Atreviendose a decir que  esa perra es la heredera al trono!—.

—Aún así ella no ha hecho nada en contra de nosotros aún, sigue sin salir de Rocadragon y no creo que eso cambie... Ella sabe que sus hijos y ella están seguros ahí—.

—¿Entonces debo dejar que hagan lo que deseen y sigan viviendo creyendo que pueden intentar tomar mi trono?— preguntó Aegon molesto.

—Aegon tiene razón, majestad— intervinó Otto— Lo que Rhaenyra ha hecho con su hija cuenta como traición. Y usted conoce el castigo que se les da a los traidores, sin tomar en cuenta en que cuna nacieron—.

—Pero no cuentan con un ejército y los recursos necesarios—.

—La reina tiene razón, majestad. Los Lannister apoyamos su reclamo, pero enfrentrariamos un gasto enorme únicamente para construir más flotas, y tendríamos que darles armas a los hombres, además— agregó Jason Lannister, provocando que Aegon se pusiera de pie y dejará caer ambos puños sobre la mesa.

—Hay que someterlo a una votación—sugirió el maestre Orwyle.

La votación procedió a realizarse y fue gracias al voto de Aemond y los que respetaban mas a Alicent que a Aegon, que se decidió continuar "en paz" con Rhaenyra.

—No se realizará un ataque, a menos que Rhaenyra intente algo, en cuyo caso el rey no tendrá que volver a consultarlo con su consejo, sino que únicamente nos dará ordenes de como desea actuar ante ello— aclaró Otto y todos asintieron.

—Antes de que se retiren, quisiera decir una cosa más, mis lores— dijo Aegon mientras se ponía de pie y daba la orden de abrir la puerta del lugar a uno de los guardias—Rhaenyra y los suyos me quitaron a uno de mis hijos y el otro murió por causas naturales, quedándome así sin herederos. Como su rey necesito asegurar mi línea de sucesión, por lo que he decidido que se rompa el compromiso entre mi hermano Aemond y Lady Floris Baratheon, ya que ella se casará conmigo—.

Lady Baratheon entró al salón en ese momento, llena de orgullo caminó hasta quedar al lado de Aegon, quien tomó su mano y dejó un beso en esta, provocando que la chica se sonrojara frente a todos los hombres.

"Me parece que la chica es más estúpida de lo creía" se dijo así mismo Aemond al ver a la chica tan emocionada de estar con su hermano.

Aunque a Aemond la noticia no le provocaba demasiado, a Alicent por otro lado, se notaba que le había molestado demasiado aquello.

Y no pudo evitar protestar en cuanto empezó a escuchar las felicitaciones que los demás miembros del consejo daban a su hijo.

—Apenas han pasado tres meses desde la muerte de Healena, no es correcto que tomes una esposa tan pronto... Menos la mujer que está comprometida con tu hermano—.