Yes to heaven || YEONGYU

Interlude: Mírame a los ojos

Aún con el destello abrumador que provenía de los reflectores que cegaban sus facciones atormentadas para ese momento, supo que hacer. Corrió, corrió hasta que unos brazos lo encerraron como una cárcel, y al intentar liberarse, sintió que la respiración se le cortaba. No podía pensar, solo sentir, y aquella preocupación rebosante en la boca de su estómago se juntaba.

—¡Taehyun, Taehyun!— gritaba con desespero mientras clavaba sus uñas en los brazos que le detenían de ir a ayudar, al chico que estaba recibiendo una paliza que lo llevaría al hospital.—¡Carajo, suéltame. Taehyun!

—No puedo Kai, lo lamento. Seguridad vendrá en un minuto y lo ayudará.

No había notado el como Choi Soobin, su novio. Era quien le sostenía impidiendo ir en defensa.

—¡No puedes saber eso, suéltame. Los van a matar, nadie está haciendo nada, por favor!—lloro desconsolado al ver la escena frente suya con impotencia.

El golpe de el puño impactando con aquel rostro que siempre tenía una sonrisa reluciente que tenía el poder de siempre hacerlo sentir mejor. Desencajandolo, masacrandolo. La desesperación corría por sus venas cuando escucho el jadeo adolorido y la respiración entre cortada del alfa. Observó cómo a uno de los otros amigos de Yeonjun, Minho, le estrellaban la cabeza contra el pavimento, dejando una horrible sensación a todos los presentes que solo observaban.

—Eh, si que al menos lo dejaste inconsciente por un buen rato. Buen golpe amigo mío. Sigue este imbécil

Cuando señaló el desgastado cuerpo cansado de Taehyun en el suelo, Kai creyó que estaba apunto de perder la cabeza.

Los suspiros aliviados resonaron en su mente cuando la ayuda llegó.

Los guardias terminaron por con un teaser dejar inconscientes a los dos enormes hombres en la escena. Para inmediatamente dejar a la póliza actuar.

Entonces los brazos que se sentían como cadenas fueron removidos, y no supo como llegó, pero termino arrodillado con lágrimas en los ojos, mirando temblorosamente el cuerpo golpeado gente a el. Entonces el chico le observó de vuelta, con los ojos entrecerrados.

—Vamos Hyunka, no deberías llorar, estoy bien, a ese imbécil le costaría mucho más deshacerse de mí. Hierba mala nunca muere.

Entonces volvió a respirar, un sollozo y una sonrisa inquebrantable se elevó en su cara.—¡Lo siento, lo lamento tanto, perdón por no haberte ayudado, estoy tan arrepentido, estaba asustado, creía que era el fin!

Sintió la mano fría en su mejilla, acariciando levemente a pesar del alarido de esfuerzo que emitió, el alfa mantuvo su compostura y le dió su mejor sonrisa brillante.—No es tu culpa, ni siquiera debiste observar algo así, perdón por haberte preocupado. Y también lamento haberme metido, odio la idea de pensar que me veas como alguien violento, es una mierda, pero Beomgyu estaba en problemas. Diría que puedo levantarme solo, pero siendo honesto, el puño de ese cabroncito me ha dejado tan exhausto que está vez dejaré que los paramédicos me levanten.

Agarro su mano fuertemente mientras asentía, suspirando a profundidad.

—Disculpe joven, necesitamos que se separe del herido. Lo llevaremos al hospital para un chequeo rápido, esperamos que a comparación del otro chico, el está mejor.

El otro chico. Apenas y había notado que había más gente a su alrededor, de pronto el antiguo lugar silencioso en el que solo coexistian el y Taehyun, se amplio hasta escuchar los amargos sollozos que las dos amigas de Yeonjun, Yeji y Ryujin, soltaban al ver a Minho.

Se sintió egoísta al pensarlo, pero agradeció que el chico inconsciente con sangre rodeandolo no fuera Yeonjun, ni Beomgyu, ni Kang. Lo agradeció profundamente.