¿Mi Novia Es Un Chico?

Justin Bieber lloraría si te escuchara

—¡Jeongin!—Grito corriendo por los pasillos con la canción en mi mano.

Había pasado toda la noche escribiendo la letra y ya estaba lista.

Entro por la puerta de la sala de música, Jeongin estaba de espaldas a mí hablando con la profesora.

—Como le decía, no creo poder entregar la ahhh...—Jeongin se sorprende cuando lo tomo del brazo y lo arrastro fuera del salón.

—¿¡Qué haces, Jisung!?—Se suelta brusco.

—Salvar tu vida, eso hago—Le entrego el papel.

Él arruga sus cejas confundido y se dedica a leer la letra.

—¿Qué es esto?

—La canción—Le explicó agitado—Jeongin se que he sido un idiota y he hecho todo mal, pero estoy en serio arrepentido de haberte dejado solo y haberle causado daño a Minho.

—Sí tanto te arrepientes, deberías terminarlo—Cruza sus brazos.

—Lo haré.

—Pues si no es así, entonces—Detiene sus palabras—Espera, ¿qué?

—Dije que terminaré con Minho, no quiero seguir con esto—Suspiro—Sólo quiero que él sea feliz y arreglar las cosas contigo.

Jeongin me mira detenidamente, tratando de comprender lo que dije.

—¿En serio lo dejarás? ¿Ya no lo quieres?

—Por supuesto que lo quiero, pero no soy lo que él quiere y ya no pretendo serlo. Me quedaré con el recuerdo de su sonrisa porque se que no la merezco—Sonrío con tristeza.

—Jisung...

—Está bien, aún los tengo a ti y a Felix, siempre ha sido así y está perfecto.

Jeongin baja su cabeza, da un paso hacía mí y me abraza.

—Siento haberme enojado, ahora me siento como un tonto—Murmura.

Le devuelvo el abrazo con más fuerza.

—No es tu culpa, no has hecho nada malo—Le aseguro y lo siento tensarse bajo mis brazos.

Cuando nos separamos noto nerviosismo en sus ojos.

—¿La canción de que se trata?—Cambia de tema.

—De una margarita que se convierte en rosa sólo para que el príncipe se fije en ella—Relato, mi tono melancólico.

—¿Está basada en hecho reales?—Levanta una ceja—¿Se la escribiste a Minho?

Asiento y en ese momento la profesora llama a Jeongin. Al entrar allí ya estaría inscripto en el festival, no habría vuelta atrás.

—¿Crees que puedo hacerlo? ¿Cantar delante de tanta gente?—Pregunta intimidado.

—Te lo aseguro, les patearas el culo a los demás cantantes. Justin Bieber lloraría si te escuchara.

Jeongin ríe y antes de entrar habla:

—Gracias, Jisung hyung—Me sonríe.

Al salir de la escuela, saco mi teléfono del bolsillo de mi pantalón y lo prendo.

La pantalla explota con notificaciones de un mismo nombre: Minho.

Decidido reúno fuerzas y le escribo un mensaje:

Te veo en el centro comercial a las siete.

Hora de despedirte, Han Jisoo. Gracias por conseguirme un novio sexy.