DXD One-shots

OneShot 7: Los Deberes De Lucifer

Hyodou Issei estaba parada frente al Gran Castillo de color plateado con rejas en las ventanas, se acercó hacia la puerta tocándola un par de veces, la gran puerta se abrió y el castaño entro, al entrar vio una gran pasillo, el pasillo se ilumino con varias antorchas qué se encendieron cuando el castaño entro en él, vio una luz al fondo del pasillo, se dirigio hacia la puerta de donde provenía esa luz.

—Con permiso —Issei abrió la puerta viendo a Sirzech y Grayfia en la habitación.

—Issei-kun qué bueno que viniste —Sirzech se acercó hacia el castaño.

—Rias dijo que era algo importante así qué vine lo más rápido qué pude —Issei rasco la parte trasera de su cabeza intentando parecer serio.

—Bueno Issei-kun el problema es que tengo una reunión importante con Azazel en unos minutos y no puedo descuidar mi trabajo como Lucifer así qué por eso te llame, tomarás el lugar de Lucifer hasta que termine la reunión —Issei alzó los ojos de la sorpresa ante la propuesta del pelirrojo, ya le habían dicho que iba a convertirse en un Maou en algún futuro pero no pensó que sería pronto.

—¿Y...Yo sustituir al Maou Lucifer? —Issei se señaló así mismo con sorpresa en sus palabras.

—Será solo un par de días en lo que termine los asuntos con el Líder de los Ángeles Caídos y luego volveré, Grayfia te ayudará en lo que necesites —El castaño miró a la peliplata y ella solo asintió con la cabeza ante lo dicho.

—Creo que está bien, supongo

—Muchas gracias Issei-kun —El pelirrojo se acercó hacia Issei abrazándolo con fuerza y levantándolo en el aire —Bueno me retiro.

Sirzech desapareció en un círculo mágico dejando al castaño y a la peliplata solos.

—Bueno ¿Que se supone que deba hacer ahora? —Issei tocó con su dedo su mejilla derecha.

Grayfia le dedicó una cálida sonrisa e hizo aparecer una gran pila de papel en la mesa.

—Hay que firmar todas estos permisos —Grayfia le entregó un sello al castaño.

El castaño comenzó a sellar cada uno de los papeles qué tenía delante, los que ya habían sido firmados fueron tomados por Grayfia y puestos en un archivador de metal qué estaba del lado derecho de la habitación, en el momento en que la peliplata se agacho para poner los papeles en el cajón de abajo Issei miro su enorme trasero, a pesar de tener el vestido de sirvienta podía distinguir su figura voluptuosa.

Grayfia volteó su cabeza mirando al castaño, Issei miró hacia las hojas de papel que tenía delante poniendo el sello en cada uno de ellos con rapidez haciendo que la peliplata soltara una risa.

Issei había terminado la mitad de todo el papeleo qué había, lanzó un suspiro de pesadez viendo el papeleo qué aún tenía.

—Ya casi es de noche —Grayfia miro el reloj que estaba arriba de la puerta y caminando frente a la mesa.

—Aun tengo muchos papeles que firmar —Issei siguió poniendo el sello en cada uno de estos.

—No se preocupe, le traeré algo de comer, con su permiso —Grayfia hizo una reverencia haciendo que su par de manzanas quedarán a la vista del castaño y después salir de la habitación.

Issei solo continuó firmando los papeles con rapidez intentando ocultar su sonrojo, dio un gran suspiro en el aire viendo todo lo que aun faltaba, algunos solo les ponia el sello y otros los leía con poca atención.

Escuchó la puerta abrirse y vio a Grayfia que traía una bandeja con una tetera de porcelana y un plato de galletas, puso la bandeja en una esquina de la gran mesa sirviendo un poco del té en la taza y poniéndola al lado del castaño.