Nos volveremos a ver - Lawlight (Death Note) [1]

8

Horas después:

Misa se ve fatal durmiendo ahora mismo. Se movió del lugar donde la había acomodado.

Tiene los brazos en una posición muy rara. Me volví a mover un poco mientras apartaba mi vista para mirar a otra dirección; otra vez la ventanilla.

Se ven muchas luces diminutas abajo, con una mano toqué accidentalmente a Misa cuando trataba de girarme. A consecuencia de mi movimiento ella casi cae del sillón.

Pero la sujete e hice que se vuelva a sentar.
¿Cómo es que duerme tanto tiempo en esa posición? ¿Y tan profundamente?

Me quedé mirando la ventana por un largo rato. Al parecer aún falta mucho.

Ya he pensado en un montón de cosas. Pude mantenerme despierto por muchas horas, me sentí agotado (seguramente por pensar), finalmente pude y decidí quedarme dormido.

Las 1:00 a.m:

—Light. —Sentí que alguien me sacudía—. Oye… —Al reconocer la voz toda mi mala gana desapareció, abrí los ojos y me levanté del sillón rápidamente, como si acabarán de decir que el avión está cayendo.

Y sí. Es L, me miraba con curiosidad.

—Ya llegamos, ¿podrías despertar a Amane? —me preguntó, mientras seguía con su mirada de: «¿Por qué te levantaste tan agresivamente?». También en su voz note una chispa de curiosidad. Aunque no lo preguntó con palabras, su expresión lo delata.

—Pensé que si tú me despertabas era por qué algo importante ocurrió. —Primero respondí lo que parecía preguntar su voz y expresión—. No te preocupes, yo despertaré a Misa.

L sintió.

—No te demores, los esperaremos abajo —diciendo eso se marchó.

Me giré.

—¡Misa, Misa! —La sacudí tanto que su cabello se desordenó y algunos de sus mechones cayeron a su rostro.

No tardo en abrir los ojos y mirarme con incredulidad.

—…¿Ya llegamos? —Rápidamente se arregló su cabello con sus manos mientras note que inflaba un poquito sus cachetes.

Típico de Misa.

—Así es. —La solté.

—Está bien —se levantó y salió del sillón—. Debiste despertarme con más cuidado, recuerda que soy delicada, me apretaste tan fuerte los brazos que me duelen —me reclamó con tono de queja y cara de drama.

—Disculpa.

Los ojos le brillaron y todo su humor quejoso desapareció en un segundo.

—¡No es para tanto! ¡Bajemos!

Me jalo del brazo, haci bajamos. Una vez fuera del avión unas mujeres nos entregaron las maletas.

—Tengo sed. —declaró Matsuda aún adormilado.

Mire a su dirección y vi que alguien le entregaba una botella de agua, Matsuda se sorprendió y bebió el agua de lo más rápido.

También me entregaron una botella de agua a mí, bueno; a todos nosotros, ya estamos fuera del: Aeropuerto internacional de Kansai en Osaka.

El soplido del viento de la madrugada se hizo fuerte de repente.

—Preparémonos mentalmente para trabajar tres días seguidos sin ninguna sola distracción. —habló Aisawa, mientras abría el botellón de agua con un semblante serio.

—¡Les deseo mucha suerte, chicos! —Nos animó Misa elevando la botella de agua.

—¡Gracias, Misa! —Dijo Matsuda acercándose a Misa para luego chocar su botella de agua con la de Misa, ella se río y Matsuda se apenó.

Mire más a mi alrededor buscando a Ryusaki con la mirada.

Ya lo veo. Está en un rincón mirando hacia el cielo. Tiene las manos en sus bolsillos. Se ve tristemente lindo.

Yo también miré al cielo, me sorprendí demasiado al ver tantas estrellas, no sé cuánto tiempo pasé mirando hacia arriba, cuándo volví a mirar a mi alrededor vi a todos también mirando al cielo.

Cogí las maletas de Misa, demasiadas maletas las que tiene, y estoy seguro de que en todas lleva sus ropas preferidas, sus muñecos extraños, sus maquillajes y demás cosas que compró creo que en la cita que tuvimos en Inglaterra.

Varias limusinas se detuvieron en frente de nosotros.

—¡Vaya! —Misa me miro—. ¡Ven Light, subamos! —Corrió hacia la limusina que justo a tiempo fue abierta por el conductor.

Pero antes de ir hacia ella, cargue sus maletas a la parte trasera de esa limusina. Luego me senté a su lado, y al lado de mí se sentó L (De cuchillas). Quedé en medio de los dos.

Por alguna razón sentí como si Misa y L discutieran telepáticamente. Debe ser solo el instinto de Misa. Después de que L dijo:

Flashback:

Junio de 2007:

—Pensé que vigilar a Light encadenándolo conmigo sería buena idea, pero luego lo descarte —reveló L.

—¡¿Qué?! —gritó Misa con estupefacción.

En lugar de haber oído lo que L reveló tenía cara de haber oído un: «Pensé en quitarte a Light, pero luego lo descarté».

—¡¿Cómo se te pasó por la cabeza algo tan sucio?! —Miró a L con la cara roja de furia e indignación.

—¿Sucio? Debe ser que tú lo tomaste como algo sucio en otro sentido. —L le devolvió la mirada, solo que a diferencia de Misa él estaba sin tranquilo.

—¡¿Me echarás la culpa?! ¡Es culpa tuya por tener en cuenta pegar a mi Light a ti con unas esposas!

L la ignoro y Misa siguió, incluso lo insulto. La tuve que callar yo mismo.

Fin del flashback.

Mire a L, luego sacudí un poco la cabeza recordándome que si lo miro mucho sospechara. Soy muy cauteloso. Es decir que sé actuar de forma cautelosa, por ello oculto muy bien que estoy enamorado de él.

En el cuartel de Japón:

Estamos parados mirando al cuartel, el cuartel de Japón, esto m-

—Que recuerdos —habló L.

Me giré para ver a L que se paraba a un costado de mí.

—Justo eso es lo que estaba pensando —murmure para mi mismo.

Minutos más tarde:

Ryusaki dijo que la habitación de Misa será la misma de hace un poco más de un mes, después de subir sus maletas y dejar a Misa en su nueva-antigua habitación; todos estamos en el cuarto de investigación, acá no hay solo un cuarto de investigación, hay varios, ya que este cuartel es mucho más grande que el de Inglaterra.

Si no mal recuerdo; L mencionó que ese cuartel fue construido para resolver otro caso, un caso de Inglaterra.

Matsuda por primera vez en las últimas horas estaba con una expresión sería revisando algunos documentos. Al igual que Aisawa.