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Todo había iniciado una noche después de la batalla en el día del exterminio, Lucifer se estaba hospedando en el hotel por tiempo indefinido y eso tenía a Alastor molesto ya que lo encontraba a donde sea que fuese: en la sala, en los pasillos, la cocina, en el balcón, ¡En todos lados! Cuando pensaba que podría tener unas horas de paz sin encontrarse a Lucifer y podía estar tranquilo, ¡aparecía en algún canal de la televisión! Las mismas noticias se habían vuelto un sufrimiento.

"Aquí les habla Katie Killjoy y después del no exterminio la población de pecadores quiere conocer más del rey del infierno, ¡Lucifer!. Cómo fue que cautivo a las esposas de adán y QUE NO LES HABRÁ HECH-

La televisión entró en cortocircuito y se apagó en unos instantes. Lucifer, que descansaba acostado en el sofá, miró a Alastor que tenía un aura negra cerca suyo pues había utilizado sus poderes para dañar el aparato.

—Se estaba poniendo interesante

—No veo porque escuchar lo que tienen que decir de ti en las noticias. Tampoco vi la necesidad de tu derroche de palabras mientras peleabas con adán —dijo Alastor exasperado

—Adán no es alguien de mi agrado, si tengo oportunidad de joderlo lo haré — ahora Lucifer se sentó y miraba a Alastor que lucía claramente molesto

—Claro, diciendo que te cogiste a sus esposas. Que tan desesperadas tuvieron que estar para recurrir a ti ¡JA! — Alastor soltó una carcajada que pronto dejó de escucharse al notar que Lucifer se había levantado de su asiento y ahora estaba parado enfrente suyo, su cara de satisfacción se mostraba mientras una de sus manos descansaba en su cintura.

—Creo que has de tener conocimiento que demonios como tu puede cambiar su biología, si algún día quieres que te demuestre en qué otras cosas soy bueno, aparte de pelear, puedes buscarme en mi habitación—dijo mientras hacía una seña con sus dedos cerca de su boca y se reía de la cara de disgusto de Alastor. Lucifer se fue a quien sabe dónde y dejó al demonio de la radio solo en la sala.

Alastor no pensaba que las cosas iban a desenvolverse así, pensó que el rey iba a contestarle algo de vuelta, no ofrecerle una demostración de sus habilidades... ¿Qué acababa de pasar? no entendía cómo habían llegado a ese punto, pero lo que sí estaba seguro era que esas palabras habían movido algo en él. No podía creer lo descarado que podría resultar ser Lucifer.

[...]

El demonio radio trató de ignorar el recuerdo de la propuesta de Lucifer. Habían transcurrido dos días y seguía pensando en sus palabras. Es cierto que los demonios poderosos como Alastor pueden modificar su cuerpo a su antojo, por lo general usaba esta habilidad para intimidar a sus víctimas y a quienes se atrevían a siquiera cuestionar su poder o cuando era una pelea podía manifestar ciertas partes a su cuerpo. No obstante, en estos momentos no pensaba modificar su cuerpo para asustar a intrusos en el hotel, no había una batalla a la que tenga que alargar sus extremidades y volverse casi irreconocible para el enemigo... ahora tenía que cambiar una parte específica de su cuerpo

Y lo hizo

Lo hizo una mañana que la curiosidad lo estaba molestando desde muy temprano así que decidió terminar con eso. No fue complicado ni doloroso, era diferente tener una vagina, pero no era molesto así que tomó la decisión de no cambiarlo y mantenerlo así el resto del día. La mañana transcurrió de forma normal, tenía el trabajo como el administrador del hotel, ayudaba a Niffty con sus tareas cuando se presentaba un problema como la vez que se atascó en el WC. Por la tarde pasó en su cabina de radio y aprovecho para molestar a Vox quitándole la atención de los pecadores de sus aparatos.

Al finalizar el día pensó que había sido como ningún otro, llegó la hora de irse a dormir. Ciertamente no presentó problema alguno con el cambio en su cuerpo. Se movía en la cama tratando de dormir, pero nuevamente surgió la pregunta sobre por qué razón había cambiado su cuerpo por algo que dijo Lucifer, el rubio solo estaba para molestarlo. El maldito enano, siempre se metía en las conversaciones que tenía con Charlie y Vaggie con respecto al hotel, daba su opinión que no era solicitada y lo desafiaba cada que podía. Traía buen vino y lo compartía con él como si no pudiese conseguirlo por su cuenta. Parecía que vivía pegado a Alastor, cuando no tenía nada que hacer afuera como rey del infierno, pasaba con él en la cocina queriendo hotcakes, dejaba un desastre en el lugar cuando cocinaba y le brindaba un poco de lo que preparaba, Alastor estaba seguro de que algún día Lucifer envenenía la comida. Y sobre todo estaba la sonrisa que era la principal razón de su molestia, causaba que él se sintiese raro, desprotegido a pesar de no hacer nada y no le gustaba sentirse así.

Alastor dejó de pensar y notó algo raro en sus ropas, sintió parte de su ropa interior húmeda. Su mano exploró la extraña mancha de humedad y se estremeció cuando sus dedos pasaron más allá de su monte de venus. Sus dedos bajaron y en su vagina fue que descubrió que ahí empezaba a humedecerse. El demonio presionó sus dedos nuevamente y gimió ante la sensación extraña que se apoderaba de su cuerpo. Bien, no tenía conciencia de que su cuerpo podría actuar así.

—Mierda esto no puede estar pasando

Se las arregló cambiando su ropa y tirando las ropas húmedas a un lugar de la habitación y volvió a dormir.

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holi 🥺

Maldito Lucifer. [appleradio]Where stories live. Discover now