HACIA LA VICTORIA

CAPÍTULO 16

N/A: Holis!!! Por aquí os dejo el siguiente capítulo de esta historia, espero que os guste y que le deis mucho amor, nos vemos en comentarios, besos!!!

SILVIA

Me monto en el coche y conduzco hasta el colegio con una sonrisa, ha sido la mejor noche de mi vida, y todo se lo debo a Ona, no puede ser más perfecta, por primera en vez en mucho tiempo me he sentido segura de ser yo misma, de dejarme llevar.

Llego al cole con tiempo suficiente para preparar las cosas de la clase antes de que lleguen los niños, e incluso bajo a la sala de profes para tomarme un café antes de que empiece la jornada.

Lola llega cabizbaja, como los últimos días, y en cuanto me ve, viene a abrazarme para luego ponerse en la fila con el resto de sus compañeros. Ayer por lo menos volvió a hablar con Martina y con Lucía durante el entrenamiento lo cual ya es un paso bastante grande.

A media mañana, justo antes del recreo, recibo un mensaje de Joan en el que me pide que cuando tenga un minuto le llame, así que en cuanto suena el timbre y todos los niños corren al patio, cojo mi móvil y marco su número.

- Dime Joan- digo cuando me contesta después de un par de tonos.

- ¿Puedes hablar? Será solo un par de minutos.

- Tranquilo que puedo hablar sin problema, estamos en la hora del recreo- digo sentándome en mi silla.

- Perfecto, verás, acabo de salir del centro de acogida de Lola, he estado hablando con la directora y ambos pensamos lo mismo, lo que menos necesita la niña ahora son más cambios. Así que me alegra informarte de que tienes luz verde para iniciar los trámites de adopción de Lola.

- ¿Me lo dices enserio? – pregunto con los ojos vidriosos, reteniendo las lágrimas que amenazan con salir.

- Totalmente cuñada, bueno, espero que no te moleste que te llame así.

- Para nada, pero... ¿ahora que debo hacer?

- La directora, que ha sido majísima, me ha facilitado una copia de todos los papeles que tienes que rellenar y me ha dado también una lista de todo lo que debes presentar, ambos pensamos que cuanto primero hagamos las cosas mejor, así que tú dime cuando nos podemos ver para quitarnos la burocracia del medio.

- Si te parece bien, y no es mucha molestia, podrías venir aquí al colegio, tengo la última hora libre, podemos rellenar todo aquí en uno de los despachos de usos múltiples, estaremos tranquilos.

- Genial, pues luego nos vemos, y enhorabuena cuñada- dice antes de despedirnos y colgar.

No me lo puedo creer, estoy un paso más cerca de hacerme con la custodia total de Lola. Ante ese pensamiento una lágrima rebelde rueda por mi mejilla, miro mi reloj para comprobar la hora y, como todavía quedan un par de minutos de recreo, voy al baño a lavarme un poco la cara para refrescarme.

La última hora parece no llegar nunca, ahora mismo estoy terminando la clase de educación física con mi tutoría, como ejercicio final les he puesto un pequeño recorrido de obstáculos, y justo mientras estoy haciéndoles la vuelta de demostración veo a Joan entrando a lo lejos.

No más de diez minutos después me encuentro bajando las escaleras, después de haber dejado a los niños en clase, para reunirme con Joan.

- Así que tenemos otra deportista en la familia ehh, Ona me dijo que tenías el título de entrenadora de futbol también- comenta mientras lo dirijo hacia el despacho que vamos a utilizar.

- ¿Ona te ha hablado de mí antes de habernos conocido ayer? – pregunto curiosa.

- Mi hermana no ha dejado de hablar de ti desde que te conoció.

Me sonrojo sin poder evitarlo, y Joan se ríe cuando lo nota. En seguida nos sentamos, saca todos los papeles y me va explicando con sumo detalle para qué es cada uno y dónde debo firmar. Además, de todos los papeles que debo entregar, tenía una copia en el ordenador, por lo que aprovecho para imprimirlos.

- Bueno, pues ahora mismo, llamo un a un amigo que me debe un favor, que es el que se encarga de todos estos trámites en el juzgado, a ver si puede colarnos para que tengas cuanto antes la custodia de Lola y pueda ya irse a casa contigo.

- ¿Crees que tardará mucho? – pregunto para hacerme una idea del tiempo que tengo para prepararlo todo.

- No tengo ni idea, ahora cuando hable con él te llamo y te lo confirmo ¿vale?

Recogemos todo y lo acompaño hasta la salida, prometiéndole que un día de estos le invito a lo que quiera para devolverle el favor, y justo cuando se va suena el timbre que indica el final de la jornada de hoy, así que vuelvo a mi aula, recojo mis cosas y salgo en busca de mi coche.

Estoy deseando hablar con Ona para contarle las buenas noticias, pero todavía debe estar entrenando, así que voy a mi casa, me pego un ducha para intentar relajarme un poquito, pongo una lavadora con la ropa que me dejó hoy Ona, y luego preparo algo sencillo de comer, un poco de pasta y un filete de pollo.

No hago más que terminar de comer cuando suena mi teléfono, el cual todavía no había sacado del bolsillo de la cazadora, por lo que cuando voy a cogerlo están a punto de colgar.

- Pensé que ya no me ibas a coger- suelta Joan con tono gracioso- te llamaba para decirte que acabo de hablar con mi amigo, y después de explicarle el caso... me ha dicho que como mucho en tres días podrás tener a Lola contigo.

- ¿Me lo estás diciendo en serio? Eso es increíble, tengo que preparar todo para cuando venga, pero no puedo estar más feliz, muchísimas gracias de verdad. Te debo una y de las gordas.

- Con ser su tío favorito ya me doy por satisfecho- contesta más feliz que una castañuelas.

Hablamos un poco más antes de colgar y luego me pongo a fregar lo poco que había ensuciado con la comida. Pero al rato mi teléfono vuelve a sonar, esta vez es Ona.

- ¡Amor! – saluda entusiasmada haciendo que yo sonría aún más- ¿Qué tal el día?

- De los mejores días de mi vida- confieso feliz.

- ¿Y eso?

Le cuento todo lo que ha pasado esta mañana y lo que me ha dicho Joan hace rato por teléfono y, sin verla, puedo saber que está sonriendo igual que yo.

- Eso es fantástico amor, estoy super orgullosa de ti- me contesta cuando termino de hablar.

- Sí, ahora me toca prepararlo todo para cuando llegue, comprar los muebles para su habitación, algún libro que sé que la encantan, algo de ropa...

- Oye, ¿qué te parece si empezamos hoy con todo eso? Yo te llamaba para ver si hacíamos algún plan con las chicas, porque Ale no está muy bien, lo ha dejado con Olga, y quería animarla un poco.

- Ay pobre Alexia, pero... ¿tú crees que las chicas querrán venir a comprar las cosas de Lola? Además que no saben ni siquiera su situación ni que quiero adoptarla.

- Podemos hacer una cosa, quedamos con ellas para tomar un café, les contamos todo y que decidan si quieren venir o no, pero ya te adelanto que estoy segura al noventa y nueve por ciento de que las va a hacer ilusión y se van a venir.

- Está bien, ¿a qué hora quedamos?

- Pues todavía nos queda una sesión de análisis a nuestro próximo rival así que... por que no te vienes como en cuarenta minutos o así a la ciudad deportiva y ya salimos todas juntas de aquí. Si quieres no te traigas el coche que ya te acerco yo luego.

- Perfecto, en un rato te veo. Te quiero- confieso sonrojándome un poco aunque ella no me esté viendo.

- Yo también te quiero, amor, hasta ahora.