⇝33 ღ

69 5 0
                                    

—Bueno, antes que nada, quiero agradecerles por dejarme venir hoy a su casa —habló Melanie.

—No es nada —dijo Joshua.

—Y bueno, ¿desde cuándo tienen esta casa?

—Como nuestro matrimonio aún es algo reciente, tenemos una semana viviendo aquí, aunque ya casi tres meses viviendo juntos —contestó Joshua.

—Sí, anteriormente vivíamos en Corea. Bueno, al menos yo solo tuve oportunidad de estar ahí dos meses. Joshua es de ahí.

—¿Cómo se conocieron? —preguntó Melanie.

—Buena pregunta —dijo Joshua —Casi nadie sabe cómo nos conocimos, e incluso nuestros padres se sorprenden.

—Sí, fue hace dos veranos —hablé —Estaba en la playa y ¿qué te diré? Andaba probando suerte, me acerqué a él y le hablé.

—Sí, tuvimos un bonito verano. No supe nada de él hasta que después de varios meses mis padres me llevaron a una cena en donde nuestras familias coincidieron debido a la relación ya firmada.

—Recuerdo haberme sorprendido mucho al verlo ahí. No perdí tiempo y lo besé.

—Los días siguientes estuvimos pasándola juntos.

—Me animé y decidí pedirle que fuéramos novios.

—Mantuvimos una relación de dos años y algunos meses en total —dijo él.

—¿Qué tienen planeado hasta ahora?

—Yo quiero terminar mis estudios. Me faltan algunos meses más  —respondió Joshua.

—Yo quiero dedicarme y dar mi máximo en la empresa.

—¿Aún no piensan en niños?

—No —dijimos ambos y reímos.

—Creo que todavía no es tiempo —hablé.

—Sí, eso será más adelante.

—¿Qué es lo que más les gusta el uno del otro? —preguntó interesada.

—Bueno —miré a Joshua detenidamente, observé cada detalle, cada rasgo de su rostro.

—Su sonrisa, sus ojos... Podría decirse que todo en sí.

—¿Y a ti Joshua?

—Igual, todo —dijo sin apartar la mirada de la mía.

—Y para ti Jeonghan, ¿qué proyectos tienes para la compañía?

—Queremos atraer a más inversionistas para ofrecerles nuestros servicios, darles una mayor calidad, mejorar el trabajo; en sí, dar un cambio para bien tanto para la empresa como para los clientes.

—¿Te consideras ambicioso?

—En este aspecto sí.

.
.
.
.
.

Después de una hora de entrevista nos sacaron algunas fotos y se fueron. Era domingo, estábamos en diciembre y la casa se veía tan vacía sin ese toque navideño.

—Jeonghan … ¿Y si vamos por un árbol y algunas decoraciones?

—Me parece una idea agradable.

Subimos al auto y fuimos por un árbol y luego por algunas decoraciones. Entre los dos elegimos el rojo y dorado.

Al llegar a la casa, Jeonghan bajó el árbol solo y yo las bolsas con luces y decoraciones. Fuimos hacia la gran sala de estar y Jeonghan colocó el árbol donde acordamos que se vería mejor. Tomé asiento en el suelo y comencé a sacar las cosas; Jeonghan se sentó junto a mí y me ayudó con algunas cosas. Colocamos primero las luces y después las esferas; él tuvo que cargarme en algunos casos, ya que el árbol era inmenso.

Al terminar conectamos las luces y el árbol quedó lindo. Me acerqué a Jeonghan para que ambos lo admiráramos; voltee a verlo y él hizo lo mismo. Miré sus labios; son tan delgados y suaves que en verdad me he vuelto adicto a ellos. Me acerqué un poco más y él cerró el espacio que quedaba entre nosotros.

Nos besamos como nunca lo habíamos hecho. Creo que sentí bonito ya que era la primera vez que nos besábamos porque ambos queríamos, no porque teníamos que quedar bien con la gente.

La cosa se puso un poco incómoda después de eso, así que mejor pregunté algo que en realidad tenía duda:

—Jeonghan, ¿dónde pasaremos la Navidad?

—Aquí supongo. Podemos invitar a los chicos e hacer nuestra primera cena aquí.

—Eso me agrada —sonreí.

Matrimonio Forzado | JihanOnde histórias criam vida. Descubra agora