Dangerous Woman (G!P)

27

~Tzuyu POV

Era imposible conciliar el sueño mientras sentía algo de culpa reprimida por todo lo que estaba haciendo Winter.

¿Acaso estaba ya al borde de la locura?

¿Debería apoyarla sin cuestionar, justo cómo lo he estado haciendo estas últimas semanas?

Era todo muy contradictorio, amaba a Winter como a una hermana pero ya no entendía el propósito de todo esto.

Estaba tumbada sobre mi cama mirando hacia el techo cuando un pequeño golpe proveniente de mi ventana me sacó de esa tormenta mental.

Miré en dirección al lugar donde había escuchado lo previo y encendí la lámpara de noche para saber si se trataba de Kiki queriendo entrar por mi ventana o si se trataba de algo más. Al momento en que hice esto mi mirada se fue directo al piso donde una completa extraña había caído de rodillas segundos atrás.

— Supongo que esta no es la entrada — dijo con una sonrisa nerviosa levantándose rápido — Si... iré por allá — comenzó a dar pasos largos hacia la puerta de mi habitación para perderse tras ella.

Me encontraba siguiendo todas sus acciones, pero justo antes de que llegara a la dichosa puerta hice que cayera al suelo usando mi magia.

— Que extraño, el piso está muy resbaloso ¿no crees? — quiso volver a hacerse la desentendida.

Me miró desde el suelo esta vez más cerca de la cama, para ser más específicas a un costado de esta, en un movimiento bastante rápido levantó la mano y usó gran parte de su poder en mí al arrojarme contra la pared, no podía mover ningún músculo estaba completamente pegada a esta, la chica se levantó del suelo pero esta vez con un semblante poco amigable.

— Debiste dejarme salir de la habitación — dijo ahora en un tono mucho mas serio mientras se acercaba con la mano abierta apuntando en mi dirección.

Trataba de moverme para defenderme de alguna manera pero esta intrusa parecía tener mucho más poder que yo y empezaba a molestarme.

— Eres una maldita zorra — escupí mis palabras — ¿Quieres pelear contra mi? Hazlo de forma justa.

Sonrió de forma aterradora y bajó su mano haciendo que a la par cayera mi cuerpo al suelo, me incorporé con rapidez y di zancadas hacia ella para tomarla con fuerza del cuello, pero lo único que recibí fue una sonrisa de su parte, no parecía tener una gota de miedo en lo absoluto.

— Me haces cosquillas — habló con dificultad ya que estaba cortando un poco su vía respiratoria.

— No solo eres una zorra, estás loca — la solté con brusquedad.

Se quedó unos segundos en el suelo tratando de recuperar el aliento, tan pronto lo hizo empezó a reír con ganas. La miré con confusión y algo asustada ¿quién carajos era esta mujer?

— Ou... tu vida es tan patética — dijo en tono burlesco.

No entendía a qué se refería hasta que volvió a ponerse de pie frente a mi, sus ojos estaban llorosos y tenía marcas de mis manos en su cuello pero esa sonrisa no desaparecía de sus labios.

— Te aferras tanto al amor de una bruja psicópata, solo porque tus padres siempre quisieron más a tu hermana menor —me quedé helada al escuchar aquello—. ¿Y a ti? No les importó mucho cuando te vendieron como kisaeng.

En el momento en que escuché esas palabras supe que no era una bruja común, pudo leer mi mente, peor que eso pudo ver mi pasado.

— No sabes nada — le di una cachetada sonora.