Capítulo 27

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Capítulo veintisiete 

Hoy era otro día de secundaria. Si debía confiar en el mensaje de texto que había recibido en el momento  que Andre la había dejado sola en su habitación.

Pagan no había llegado la noche pasada a la casa solo dando un llamado a Andrew para avisarle que se quedaría a dormir con una amiga, así que tuve que pasar toda la noche en una casa completamente a solas con un tipo en el que no confío.

Él no se había querido sobrepasar conmigo, por suerte. Me sentía muy incómoda durante todo el tiempo que pasamos a solas, especialmente porque sentía que él estaba ocultando alto -aunque yo también lo hacía-

Al despertar me había vestido con unos jeans ajustados en la parte superior y una blusa a cuadros, no me había molestado en tomar una chaqueta porque no tenía frío.

La mañana había sido rápida y silenciosa, al despertar me encontraba sola y el desayuno se encontraba junto a la cama con una pequeña nota de parte de Andrew, después de vestirme comí el cereal y el jugo de naranja que ahí se encontraba para luego llegar a la parte baja de la casa.

Me encontré a Andrew en el teléfono, al verme simplemente se despidió con rapidez  y guardó el aparato en el bolsillo de su chaqueta negra. Eso me hizo preguntarme si él me estaba ocultando algo en serio o solo era mi imaginación.

Siempre había escuchado que como yo estaba guardando un secreto importante sentiría que todos a mi alrededor estarían en una situación similar, pero ya al pasar unas horas solo me dio esa impresión de Andrew.

¿Me estaba volviendo loca? Deseaba que no fuera así. 

Durante toda la mañana no había logrado encontrar a Pagan por un lado y me encontraba realmente agradecida que había comenzando a comprender como funcionaba la escuela secundaria, también agradecía haber aprendido a encontrar sus clases aunque demoraba un poco más que los demás estudiantes.

En estos momento me encontraba en el segundo tiempo entre dos clases, y todavía faltaban unos minutos para que la nueva clase comenzara.

Había decidido sentarme en uno de los bancos que se encontraban alrededor y buscar con la mirada a alguna de las personas que acá se encontraban. Pero finalmente yo no fui quien buscó a quien se me acercó, en cambio ella fue quien me buscó a mi.

Gee se sentó a mi lado y cruzó sus piernas mientras que ponía sus brazos en la parte posterior de su cabeza imitando una posición de perfecta comodidad.

-- ¡Hey Gwen! -- Saludó esta chica con un tono animado -- Bueno, supongo que habrás leído el mensaje de anoche. Me han dicho que te tengo que mostrar algo que no creo que quieras ver, así que dejaré a tu criterio si me quieres acompañar o no.

-- ¿De qué se trata, Gee? -- Pregunté. Ella había hablado de manera animada y no le había podido dar un tono sombrío a sus palabras aunque claramente había intentado hacerlo.

-- No te lo podré explicar porque tampoco lo he visto -- Respondió ella encogiéndose de hombros -- De cualquier manera, ¿Vienes o no?

¿Debía ir con ella? No estaba segura si era lo mejor que podía hacer. Claramente no íbamos a avisar a nadie que nos marcharíamos y si Andrew se enteraba de que me había escapado -de nuevo- probablemente no me dejaría salir de su vista.

¿Pero podría vivir con la curiosidad de no saber de que se trataba? Podía ser algo importante y si no me arriesgaba tal vez nunca me enteraría de que se trataba.

-- Vale -- Respondí dejando salir de mis labios un suspiro -- Iré contigo.

Una sonrisa un poco más grande se apoderó del rostro de la pelirroja haciendo que me preguntara si había tomado la decisión correcta.

CCH: Casa para Compañeros Humanos #Wattys2016Donde viven las historias. Descúbrelo ahora