Capítulo 15.

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Autora: Errores ortográficos o faltas de coherencia, díganme, por favor.


Desde la mañana de ese día había sentido los nervios apretándole la garganta, algo que no era del todo normal para él ya que había estado en eventos como ese en varias ocasiones, pero nunca había sido el asistente del jefe para estos.


Todo estaba listo, las invitaciones habían sido enviadas a las personas más importantes y los asientos habían sido asignados. Ahora él se encontraba vistiendo un traje negro y su cabello estaba peinado hacia atrás haciéndole lucir elegante, demasiado a decir verdad.


Habían organizado una alfombra para que la prensa pudiera tener contacto con las personalidades que asistirían al desfile y en verdad no quería pasar por ahí ya que para él era más fácil vivir en el anonimato y es que en los eventos anteriores así había sido; se había mantenido escondido de las cámaras.


- Nunca te había visto así – dijo, Niall, recargado en el marco de la puerta de la habitación del castaño, mientras masticaba un trozo de la manzana que tenía sostenida en una de sus manos.

- ¿De qué hablas? – preguntó sin despegar su mirada del reflejo de sí mismo que le devolvía el espejo, acomodándose el cuello de la camisa con desespero y ganas de verse bien.

- Ya sabes – movió la mano, intentando dar una explicación – tan arreglado y nervioso. Pareciera que vas a tu primera cita o a un baile de graduación con el hombre de tus sueños – suspiró dramáticamente. – Aunque eso no está muy alejado de la realidad.


Louis dejó salir el aire que estaba reteniendo en sus pulmones para dejar de mirarse y poder ver directamente a su amigo.


No sabía exactamente la razón por la que estaba volviendo a confiar en Niall después de lo sucedido anteriormente, pero no tenía más opciones después de todo ya que no tenía a ningún miembro de su familia que se hiciera cargo y el señor Ryan estaría en el evento igualmente así que no había de dónde elegir.



Desde que su amigo rubio había conocido a esa cajera del súper mercado estaba en la luna y no podía decirle que no estuviera de esa manera ya que tenía una idea de cómo se sentía, ya que era lo mismo que él sentía cuando escuchaba el nombre del rizado.


Escucharon la bocina de un auto y caminó a la ventana para comprobar que un lujoso vehículo se encontraba ahí. Vio como Harry salió de él por la puerta trasera y miró directamente a la ventana donde él se encontraba, regalándole una enorme sonrisa. Se encontraba mucho más guapo que en otras ocasiones que lo había visto y eso era mucho decir ya que él siempre lo encontraba completamente guapo, casi de una manera que no se podía describir.


Volteó para mirar a Niall que seguía con la manzana para despedirse de él con una sonrisa pintada en su rostro que no recordaba el momento exacto en que había nacido, pero ahí estaba.


- Es Harry. - comentó.

- No necesitas decirlo - se burló- en tu rostro se nota, amigo.



Rió levemente y se encogió de hombros ya que no iba a ni siquiera esforzarse en negar que le emocionaba sobre manera el hecho de saber que el rizado se encontraba parado fuera, luciendo increíble y esperando únicamente por él.

Stay |Larry Stylinson|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora