Drowned. [Mermaid AU] Larry Stylinson.

Capítulo 30: El arte.

I miss you now. I guess like I should have missed you then.

Londres, 2019.

No le hacía falta cerrar los ojos para que todo estuviera oscuro. Había pulsado el interruptor y ya no había luz. Habitación sin ventanas. Mar sin agua. Sol sin calor. Escritos sin palabras. Cuerpo sin corazón.

Probablemente todo tuviera que ver con la zona en la que estuvo viviendo durante su estancia en Hawaii; pero aquí todo parecía más acelerado. Gente corriendo de un lado para otro, coches en movimiento, el sonido de los claxon instalándose en una parte de su mente. La ciudad oscura. Londres.

— Iré mañana entonces, no se preocupe.

El hombre asintió y cerró la puerta justo cuando Louis salió. Caminó un par de calles sin prestar demasiada atención a la situación; ni si quiera escuchaba el sonido de la vida reproducirse a su alrededor. Se colocó los auriculares y empezó a tararear la primera canción que seleccionó la lista de reproducción.

Por ello no fue el sonido del claxon lo que llamó su atención; sino el brazo de su hermana fuera de la ventana del coche; parecía estar gritando, y efectivamente lo estaba, puesto que al quitarse los auriculares la escuchó pronunciar su nombre a gritos.

Cruzó acelerado en el primer paso que vio y subió al coche. Su madre buscaba su mirada una y otra vez, pero Louis siempre encontraba una acción mejor que hacer para posponerlo. El cinturón, guardar los auriculares, comprobar nuevos mensajes en el móvil o mirar por la ventana. Ni si quiera había dicho hola.

— Louis, ¿qué tal te ha ido con el Señor Khan?

No tenía nuevas notificaciones y le parecía extraño. Siempre recibía una llamada o un mensaje por estas horas; Jo le contaba cómo iban las cosas desde que él se fue y discutían durante un rato sobre Harry.

Ella insistía que podían hablar por teléfono cada vez que pasara por la playa; pero eso para Louis era una tortura a la que no deseaba prestarse.

Había sido prácticamente una semana tranquila; como si no fuera real, como si estuviera durmiendo y esto fuera un sueño del cual despertaría en su cama, en una de las habitaciones de la casa de Jo; en el hotel; en la playa. En cualquier lugar. No aquí.

Charlotte le había dicho que pronto irían a su empresa a intentar recuperar su puesto fijo en la revista; por ahora, se encargaba de buscar a aquellas personas a las cuales dejó a medias cuando se fue. A día de hoy, ya casi no le quedaban proyectos.

Volvía a ser todo como antes, volvía a sentirse perdido e inútil. Podía describir su vida en tres tramos. Antes de Hawaii. Hawaii. Después de Hawaii.

Suspiró y volvió a la realidad cuando sintió el coche en marcha; su madre seguía hablando.

— Y no sé qué hacer. Como tú volviste hace unos días, creo que es mejor posponerlo para el verano que viene o quizá hacer algo por navidad, ¿verdad?

— No te está escuchando.- comentó su hemana buscando sus ojos a través del espejo.

— Lo siento, mamá. Estaba pensando en otra cosa. ¿Puedes dejarme en casa de Niall?

Su amigo había insistido en verle desde que llegaron, pero realmente Louis no estaba ni para nada ni para nadie. Quizá ahora era justo lo que necesitaba.

— No es ni medio día, estará trabajando.

— Mamá, llévame. Lo esperaré en la cafetería o algo.

— Está bien, pero esta noche te quiero en casa sin falta. Vamos a comer todos juntos como una familia.

No dijo nada más. Siguió escuchando a su madre conversar con su hermana mientras contemplaba la vida más allá de los cristales del vehículo.