Capítulo 12~ Solución

444 47 28
                                    

-¿Y ahí quedó la conversación?- Me mira, apretando los labios- No me lo acabo de creer, Gee. Me parece un argumento demasiado pobre.

-Ya, ojalá yo hubiese pensado igual que tú... En ese momento- Trago saliva y después respiro con fuerza- En parte sí era por eso, y solo en parte. Yo solo buscaba respuestas, y supongo que me vi satisfecho con algo así a la primera. Aunque la sensación de tenerlo todo claro con su respuesta no duró mucho.

-Ya decía yo. Pero bueno, ¿qué pasó para que te dieses cuenta de que había algo más?

-Pues, como si ese día no hubiese sido bastante completito, unas horas después me cruzaría con mi siguiente quebradero de cabeza. Aunque- Le devuelvo la mirada y ella levanta una ceja- Quieres detalles al respecto, ¿verdad?

-Por favor- Me dice como si estuviese implícito en nuestra conversación.

-Bien, pues al menos déjame adelantar un poco en la historia. Hasta el momento en que ya estábamos en la cama y ya nos habíamos dormido y...- Veo como Lindsay pone cara de pervertida y empieza a gesticular con las manos, sugiriendo que en ese momento pasaría algo más que "estar dormidos en su cama"- No, no pasó nada más.

-Pues vaya- Y pone morros, cruzándose de brazos.

----------

Me encontraba en medio de un buen sueño en el que ganaba jugando a los bolos sin tener que usar las bolas pequeñas debido a mis deditos pequeños.

Pero por una razón que entonces desconocía, el sueño terminó antes de lo debido y desperté, encontrándome con que era todavía de noche.

-¿Pero qué...?- Empecé a decir medio-dormido, enderezándome y pegando la mano a mi frente.

Callé en seco al ver que Frank seguía dormido a mi lado. Estaba acurrucado, cogiéndome una mano y tenía la otra sobre mi pecho, donde por cierto, sentía un ligero hormigueo. Lo que me llevó a la conclusión de que seguramente me había despertado de un golpe por su parte.

Pero lo que me mantuvo despierto fue darme cuenta de que de su boca salían sonidos raros que trataban de ser palabras. Y tuve curiosidad por tratar de descifrarlos.

-No... No te vayas. Por favor- Logré diferenciar de entre todos los balbuceos somnolientos. Pero tampoco estaba muy seguro de que fuese eso lo que estaba diciendo.

-¿Frank?- Pregunté algo inseguro, forzando la vista para comprobar que sus ojos siguiesen cerrados.

-No, por favor...- Volvió a decir y se quedó con la boca abierta, respirando por ella.

Estaba dormido. Profunda y definitivamente dormido.

Pero aun dormido, estaba nervioso. Posiblemente teniendo una pesadilla, y se veía que lo estaba pasando mal. Se retorcía ligeramente en su sitio, esta vez sin decir nada más.

Me preocupé pero no quise despertarle. Así que me limité a acostarme de nuevo y acariciarle la mejilla.

Dejé salir aire entre mis dientes, en un sonido que se suponía tranquilizador.

Por suerte funcionó y unos minutos después, dejó de moverse, sus facciones se relajaron hasta que volvió a parecer el Frank dormido de siempre y los sonidos y balbuceos cesaron.

Asimismo, el agarre de su mano en la mía, disminuyó.

Respiré tranquilo al ver que se había calmado y cerré los ojos con intención de volver a dormirme.

Our SummertimeWhere stories live. Discover now